La detonación tuvo lugar sobre las 14.00 hora local (9.30 GMT) a escasos cientos de metros de donde se congregaban los manifestantes, cerca del centro comercial Gulbahar, dijo a Efe el portavoz de la Policía capitalina, Basir Mujahid.
Por su parte, el portavoz del Ministerio de Salud Pública de Afganistán, Wahidullah Majroh, precisó a Efe que hospitales de la zona habían recibido ya tres cadáveres y ocho heridos de diversa consideración.
Ningún grupo se ha atribuido por ahora la autoría del atentado
Cientos de personas se congregaban desde anoche cerca del lugar del atentado para pedir al Gobierno que bombardee las posiciones de los talibanes en los distritos de Malistan y Jaghori, en la provincia oriental de Ghazni, y Khasurozgan, en la central Uruzgan, habitadas principalmente por hazaras.
Estas demarcaciones administrativas viven desde hace 15 días el azote del conflicto y un gran número de civiles se han visto obligados a abandonar sus hogares, explicó a Efe uno de los organizadores de la protesta, Barakatullha Rawnaq.
Los chiíes, y en especial la minoría étnica hazara, son a menudo objetivo de ataques insurgentes, muchos de ellos perpetrados por el grupo yihadista Daesh.
El último de ellos de envergadura tuvo lugar a principios del pasado septiembre, cuando un doble atentado en un barrio de este grupo religioso causó una veintena de muertos, dos de ellos periodistas, y alrededor de 70 heridos.
Dasht-e-Barchi, el barrio donde ocurrieron esas dos explosiones, fue a mediados de agosto objeto de otro atentado contra un centro educativo hazara en el que murieron 34 estudiantes y más de medio centenar sufrieron heridas.