De acuerdo con el Departamento Forestal y de Protección contra Incendios de California (Calfire), en estos momentos los bomberos tienen la situación bajo control en "el 100 %" de las cerca de 62.000 hectáreas que continúan en llamas en el norte del estado.
Esta noticia coincide con el descubrimiento hoy de otros dos cadáveres, lo que eleva a 85 el número de víctimas mortales a causa de las llamas, mientras que otras 249 personas continúan desaparecidas.
Los cuerpos fueron hallados cerca de Paradise y Magalia, respectivamente, dos localidades situadas a las afueras del bosque nacional de Plumas, a unos 160 kilómetros al norte de la ciudad de Sacramento.
El bautizado como "Camp Fire" ha arrasado casi por completo la localidad de Paradise, de 26.000 habitantes y unos 280 kilómetros al noreste del área de la bahía de San Francisco.
El incendio, que comenzó el 8 de noviembre, ha destruido unas 14.000 viviendas, más de 500 negocios y otros 4.250 edificios.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que visitó la zona quemada la semana pasada, urgió el martes al Congreso a tomar medidas que "mejoren la gestión forestal y ayuden a prevenir incendios", lo que, según el mandatario, "pondría fin a la constante devastación que ocurre en California".