Al inicio de su discurso en el acto de entrega, en Valencia, de los Premios Rey Jaime I, el monarca ha recordado que durante las últimas décadas compartió "muchos acontecimientos importantes de la vida de Valencia" con Barberá, durante los años en que ésta fue alcaldesa, como estos galardones, que apoyó "desde el primer momento de manera entusiasta".
"Nos unimos al duelo de la ciudad, y a sus familiares y allegados les enviamos desde aquí nuestro respeto y nuestro sentido recuerdo", ha manifestado Felipe VI. Por su parte, el president de la Generalitat, Ximo Puig, ha iniciado su discurso explicando que ayer fue "un día triste", y ha aludido a las palabras del escritor Mario Benedetti en las que afirmaba que "en definitiva la muerte es un síntoma de que hubo vida".
"Cuando, como en el caso de Rita Barberá, esa vida se ha dedicado al servicio público, todos compartimos la tristeza", ha aseverado Puig, quien ha añadido que la grandeza de la democracia es que permite que quien piensa diferente se convierta en adversario, pero impide que se considere un enemigo.
Puig ha resaltado que la democracia es un espacio donde, por encima de las diferencias, siempre debe primar la tolerancia, el diálogo y el respeto, y ha concluido asegurando que "si deshumanizamos la política, ésta pierde su sentido".
El alcalde de Valencia, Joan Ribó, también ha tenido palabras para su antecesora, de la que ha dicho que "siempre ha estado presente" en este acto como máxima autoridad de la ciudad, y a la que hoy se recuerda.
Por su parte, el presidente de la Fundación de Estudios Avanzados, Vicente Boluda, ha tenido un "especial y sentido recuerdo" hacia Barberá, de la que ha dicho que será recordada como una "magnífica alcaldesa", que contribuyó a modernizar y situar a Valencia "entre las primeras urbes del mundo" y, además, fue "uno de los mas sólidos apoyos" de estos premios.
