Patxi López aboga por el "diálogo" y el "entendimiento" para la nueva legislatura

En su primer discurso como presidente de las Cortes, una vez que todos los diputados han acatado la Constitución, López ha apuntado que desde el poder legislativo "debemos saber gestionar las discrepancias" y "buscar en todas las ocasiones que nos sea posible más lo que nos une que lo que nos separa", algo que, ha subrayado, es "la esencia misma" de "nuestro país" y de la democracia.

Ha rendido homenaje a quienes fueron fieles a la democracia durante la dictadura y a los defensores de la libertad contra el terrorismo, y ha emplazado a los parlamentarios a abordar las "reformas políticas e institucionales" necesarias para afrontar los problemas del nuevo siglo y dar respuesta a las demandas ciudadanas.

[[DEST:"Hay que abordar las reformas políticas e institucionales necesarias"]]

Su alocución ha sido acogida con una ovación unánime del hemiciclo, interrumpida en varias ocasiones por aplausos de los diputados socialistas.

Ha dedicado sus primeras palabras a homenajear a las víctimas del terrorismo y a las mujeres víctimas de la violencia machista, y en este ámbito ha emplazado a los partidos a buscar un pacto de Estado contra una violencia que, ha señalado, "nos humilla a todos".

Después, el socialista vasco ha desplegado una amplia declaración de intenciones y ha hecho proclamación del alcance del trabajo parlamentario y del significado de la constitución del nuevo Congreso como expresión de una España "plural en lo ideológico y diversa en la forma de entender las identidades".

Ha remarcado que la libertad "es una conquista que hay que defender día a día" y que "ningún poder debe imponerse a la ciudadanía reunida en este Congreso", por lo cual ha advertido de que en manos de los parlamentarios está la responsabilidad de defender esta "autonomía" de la política frente a "cualquier presión exterior".

Patxi López ha reconocido que el nuevo hemiciclo hay representantes de "ideologías y políticas diferentes", y con "diferentes formas de entender la identidad", pero seguidamente ha remarcado que esto "es la esencia misma de las sociedades libres".

De esta manera, ha proclamado que, junto a la "discrepancia y la crítica", el "diálogo y el acuerdo" son los "elementos fundamentales de la vida política en democracia" y a los diputados les va a corresponder "dialogar, debatir y buscar entendimientos". [[DEST:"El diálogo y el acuerdo son fundamentales en democracia"]]

"El diálogo y el entendimiento", ha enfatizado, son para él "lo grandes valores políticos que deben presidir la tarea del Parlamento.

Y todo ello en una España que ha descrito como "plural en lo ideológico y diversa en la forma de entender las identidades" y que es "ante todo, un proyecto común".

"España no es un mapa ni una identidad, es el pacto ciudadano por al libertad y por el progreso colectivo", ha continuado en la misma línea, para recordar cómo "ciudadanos y ciudadanas de cada rincón de este país tuvieron un mismo sueño de libertad que les unió a todos" y permitió lograr juntos "la época de mayor progreso y libertad de nuestra historia".

Así, el presidente del Congreso ha emplazado a los diputados, tal y como se hizo en el pasado reciente a "saber gestionar las discrepancias y buscar en todas las ocasiones en que nos sea posible más lo que nos une que lo que nos separa".

"Porque esa es la esencia misma de nuestro país, la esencia misma de la democracia", ha insistido.

[[DEST:"Hay que saber gestionar las discrepancias"]]

También les ha invitado a actuar como "garantes y guardianes de esa pluralidad y diversidad" de la sociedad "para que la esencia misma de la democracia no sea marginada", y ello a cargo de unos parlamentarios que "nos hemos reconocido mutuamente iguales" como representantes de los ciudadanos, ha añadido.

Antes de declarar constituido el Congreso de la XI Legislatura, ha advertido López de los "tiempos de gran incertidumbre" que vive el mundo y la sociedad española, con nuevos problemas y otros más viejos, como "la desigualdad insoportable entre los que tienen mucho y los que no tienen nada o casi nada".

Por ello, ha concluido, a los diputados reunidos en el Congreso les corresponde ahora abordar las reformas necesarias que permitan enfrentarse a estos problemas y "dar respuesta a lo que de verdad esperan de nosotros los ciudadanos".