El cangrejo azul se expande sin control por la desembocadura del río Mijares
En el año 2014 se detectó el primer ejemplar de esta
especie exótica procedente de la costa este del atlántico americano.
ondacero.es
castellón | 13.01.2017 08:45
La Dirección General de Medio Natural y Evaluación
Ambiental del Gobierno Valenciano ha publicado recientemente un informe que
evalúa la situación del cangrejo azul en la Comunidad Valenciana entre el
periodo 2014 y 2016. Los primeros avisos de la presencia de la especie la hicieron
el 2014 pescadores de El Palmar de la Albufera de Valencia y pescadores
deportivos que los habían capturado con caña. Las primeras eran escasas de
entre 1 y 2 individuos pero en la actualidad se sacan animales de todas las
edades, tallas e incluso hembras cargadas de huevos. Por ejemplo los pescadores
de El Palmar han llegado a pescar en dos días más de 100 kilos de cangrejos
azules.
Según el informe la especie se ha registrado ya en 12
países mediterráneos. A consecuencia de esta excepcional proliferación es
considerada una de las 100 peores especies invasoras del Mediterráneo. Desde el
Servicio de Vida Silvestre están encima de las especies invasoras para ver su
expansión pero especialmente el efecto sobre las especies amenazadas,
consideran que harían falta enormes recursos económicos y aun así sería
prácticamente imposible, tal y como afirma Juan Jiménez, jefe del servicio de
Vida Silvestre de la Consejería de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio
Climático y Desarrollo Rural de la Generalitat Valenciana. “Ahora estamos en la
tercera fase que es ver si el cangrejo azul afecta alguna especie vulnerable
como los bivalvos de agua dulce que hay en nuestras zonas húmedas”, apunta
Jiménez.
El primer individuo de cangrejo azul (Callinectes
sapidus) se localizó en el Paraje Protegido de la Desembocadura del río Mijares
en octubre de 2014. Apareció en la golasur en el interior de un asa
utilizada para capturar tortugas de agua dulce en el transcurso de una campaña
de seguimiento de quelonios. La expansión de esta especie atlántica americana
ha sido brutal en tan sólo dos años. Un hecho que no sólo ha ocurrido en la
desembocadura del río Mijares sino también a toda la Comunidad Valenciana. La primera
vez que lo encontraron se trataba de un ejemplar aislado adulto. La gola sur
todavía estaba cerrada y el agua era salobre. Después, no se volvió a ver el
cangrejo azul hasta mayo de 2016 cuando han comenzado a salir de una manera
exagerada.
Desde el mes de mayo estamos viéndolos caminando por la
orilla del río y por el fondo, incluso en época de reproducción se ven
emparejados. Luego los pescadores han ido comunicándonos que los sacan por
kilos y diariamente. Los pescan con caña y con sardina, explica detalladamente
David López, guarda del Consorcio río Mijares. El hallazgo del cangrejo azul se
comunicó inmediatamente a la Consejería de Medio Ambiente de la Generalitat
Valenciana. Un equipo de técnicos del Servicio de Vida Silvestre se desplazó al
Mijares para realizar un muestreo.
El resultado "fue preocupante", ya que se encontraron una gran cantidad de cangrejos azules de diferentes medidas y edades. Pero lo que está pasando en la desembocadura del Mijares ocurre en toda la Comunidad Valenciana. La situación del cangrejo azul con datos actualizados desde hace unas semanas es que está presente en todo el litoral mediterráneo valenciano, desde el norte de Peñíscola (Castellón) hasta el sur de Guardamar (Alicante), en el litoral costero de las tres provincias, en desembocaduras de ríos y en las zonas húmedas, tal y como afirma el jefe del servicio de Vida Silvestre de la Consejería de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural de la Generalitat.
El cangrejo recibe su nombre por las patas de color azul purpúreo. Esta especie habita originariamente las lagunas, la costa y los estuarios de la costa atlántica desde norte América hasta Uruguay. Son crustáceos que comen cualquier cosa, desde mejillones, caracoles, peces incluso carroña y otros cangrejos azules. Esta especie está presente en la costa mediterránea española desde hace años pero ha sido desde el 2015 cuando se ha disparado su expansión. “La mano del hombre ha de estar detrás pero de una manera indirecta. No sabemos si ha llegado a través del agua de lastre de los barcos de transporte, si han sido las corrientes que han trasladado las larvas entre poblaciones mediterráneas orientales y occidentales o si estamos viendo un proceso de cambio climático”, dice Jiménez quien añade que “la temperatura del Mediterráneo occidental está aumentando y los cangrejos se están adaptando rápidamente. Pero no es un fenómeno valenciano, está pasando en todo el litoral mediterráneo occidental de una forma rapidísima”.