Más de la mitad de las declaraciones del IRPF que se registraron en la provincia llevaban marcada la equis en la casilla de la Iglesia. En concreto, el 51,62%, lo que significa un mínimo descenso del 0,37% respecto al año anterior, el 2021.
En total, el número de declaraciones con asignación a favor de la iglesia católica fue de algo más de 118.000, es decir, unas 1.600 más.
El importe asignado a la Diócesis de Ciudad Real fue de 2,8 millones de euros, a los que había que sumar el fondo común interdiocesano por lo que esta cifra se elevó a los 3,3 millones de euros.
Un dinero que se destina, según ha explicado Isabel Oviedo, miembro del equipo de la administración diocesana, a obras, mantenimiento de templos o remuneraciones de salarios.
En torno al 15% de la actividad diocesana está sostenida por la casilla de la Iglesia en la declaración de la renta.
El ecónomo diocesano de Ciudad Real, Jesús Álvarez, recuerda que marcar la “X” de la Iglesia es una decisión libre y no tiene coste alguno y ha dado las gracias a los contribuyentes por apoyar a la institución eclesiástica.
