PIME Menorca ha denunciado este martes la dejadez con la que han iniciado la temporada las urbanizaciones turísticas de la isla, según refleja la encuesta dirigida a 170 asociados. La patronal ha lamentado que el hecho que estas zonas hayan recibido pocos turistas en los últimos dos años se ha traducido en una menor inversión en cuanto a mantenimiento y cuidado de las mismas, por parte de las administraciones.
En cuanto a los parámetros que se han valorado, el servicio de limpieza de playa empezó su retirada masiva de posidonia el 15 de mayo, y es precisamente la acumulación de estas algas en las entradas de distintas playas el motivo de las quejas recibidas, especialmente en Santandria y Cala Blanca (Ciutadella).
Por otro lado, el parámetro peor valorado por los usuarios en las urbanizaciones menorquinas es la red de telefonía e internet. Además de la carencia de un servicio óptimo en zonas como Cala en Bosch (Ciutadella) o Canutells (Mahón) se afea el cableado eléctrico a la vista y los servicios estructurales obsoletos. Además, se apunta en la encuesta el malestar por la falta de servicios de temporada en algunas playas por la licitación tardía por parte de ayuntamientos y Demarcación de Costas.
El documento de PIME deja en evidencia el deterioro que sufren algunas infraestructuras urbanas, la necesidad de mejorar el alumbrado público o las quejas por la falta de limpieza viaria y mantenimiento de aceras. En materia de movilidad, se ha señalado la acumulación de plantas y vegetación que dificultan los accesos por carretera a urbanizaciones como Cala en Porter y Torre Solí (Alaior) y Cala en Blanes (Ciutadella). Los aparcamientos son el segundo parámetro peor valorado por los encuestados y apuntan la importancia de regular el estacionamiento de caravanas y furgonetas, así como solicitar a la administración más puntos de recarga para vehículos eléctricos.
Finalmente, se reivindican más zonas verdes con juegos infantiles, la instalación de señalización y mejoras de asfaltado.
