La Junta General del Principado ha acogido las comparecencias de representantes de instituciones públicas de la región para dar su opinión sobre el proyecto de presupuestos. Uno de los asuntos de abierta discrepancia es la política fiscal. Las empresas advierten de que la desigualdad tributaria entre territorios genera deslocalización. El presidente de la Cámara de Comercio de Oviedo Carlos Paniceres afirma que incentiva la marcha a Portugal, Madrid y otros territorios de España por lo que aboga por una armonización fiscal como ocurre en Europa. Mientras, la presidenta de Fade María Calvo asegura que no solo afecta a empresas sino también a profesionales lo que supone la marcha de talento y conocimiento. Calvo afirma que la armonización a la baja no tendría por qué suponer menos recaudación porque provocaría más actividad y por ende más base imponible.
En abierta contraposición se muestran los sindicatos. Severino Menéndez de Comisiones Obreras advierte de un dumping fiscal. La bajada de impuesto redundaría en menor recaudación y por tanto afectaría a los servicios del bienestar. En la misma línea se muestra Nerea Monroy, de UGT, quien aboga por una reforma fiscal que eleve la recaudación con haciendo pagar a quien más tiene y reduciendo el fraude tributario.
