La operación se inició a principio de año, tras analizar una problemática en el aprovechamiento de pastos del Corredor Verde del Guadiamar y sus fincas limítrofes, habiéndose detectado un pastoreo incontrolado de ganado ovino, caprino y caballar; la presencia de animales trabados o que llegaban a atacar a viandantes y usuarios del Corredor Verde, también la producción de daños en vallados que provocaban que los animales estabulados escapasen e invadiesen vías de circulación e incluso vías férreas, creando un grave peligro para las personas y vehículos que las transitan, además de causar graves daños continuados en cultivos propiedad de agricultores de la zona, entre otros extremos.
Estos animales acababan introducidos en la cadena alimentaria, sin ningún control por parte de la oficina comarcal agraria o sanidad, a sabiendas de que los mismos se alimentaban de pastos contaminados.
Igualmente, para evitar el pago de sanciones judiciales, así como evitar embargos, realizaban la venta de sus bienes haciendo uso de identidades supuestas, sin contratos legales, logrando así evitar el control por parte de la Hacienda Pública, generando importantes ganancias económicas
Una vez finalizada la fase de investigación policial y reunidos indicios suficientes de criminalidad respecto a los investigados, la presente operación ha sido acometida este miércoles con una inspección final en la explotación ganadera en localidad de Sanlúcar la Mayor, gestionada por los dos objetivos principales de la operación (hombre y mujer), inspección que ha sido realizada por la Guardia Civil, personal de la Oficina Comarcal Agraria del Poniente, en compañía de personal de la Consejería de Agricultura y Ganadería y la Policía Local de Sanlúcar.
Una vez finalizada la inspección, se ha procedido a dejar a los animales propiedad de los detenidos estabulados y a disposición de la Autoridad Judicial, si bien algunos ya se encuentran embargados por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número cuatro de Sanlúcar.
