El presidente del Levante, Quico Catalán, acudió a la ciudad deportiva de Buñol para asistir al entrenamiento del equipo el día después de la detención del futbolista Toño García, acusado de extorsión y amenazas, entre otros delitos.
Catalán, que no suele acudir a la ciudad deportiva pero sí es un asiduo de los entrenamientos en el Ciutat de València, estuvo presente en la sesión preparatoria del equipo dirigido por Paco López justo el día después de la detención de Toño García.
Según confirmaron fuentes del club valenciano, el presidente del Levante se reunió con los jugadores y el cuerpo técnico antes del inicio del entrenamiento para trasladar un mensaje de tranquilidad en estos convulsos momentos.
El futbolista del Levante está detenido después de que el pasado viernes el juez de instrucción número 3 de Teruel decretase el ingreso en prisión de Toño y seis personas más por su posible responsabilidad en la comisión de siete delitos entre los que están extorsión y amenazas.
El presidente del Levante vio el desarrollo del entrenamiento y abandonó las instalaciones de Buñol sin hacer declaraciones al filo de las 12:15. El club emitió un comunicado el pasado viernes en el que mostraba su apoyo al futbolista y su familia a la espera del desarrollo de la instrucción, que está bajo secreto de sumario.