Alfonso Olaso

Febrero nos ha dejado de nuevo un dato para estar contento y esperanzado de cara a la Semana Santa primero, y sobre todo, el verano después, siempre con la coletilla de seguir luchando contra la estacionalidad.

Ha vuelto a subir el número de cotizantes respecto a los registrados en enero. Lo hecho además en cantidades similares a las de 2019, 2020 y 2021, rondando los 1.500 más. No ha ocurrido lo del año pasado, cuando hubo un auténtico subidón: cuatro millares más contabilizó entonces la Seguridad Social.

“¡Tampoco será entonces para tanto!”, dirán o pensarán. Pues depende de donde pongan el listón de ese “tanto”. Porque sigue creciendo el número; siguen aumentando los emprendedores que se atreven, seguro que viendo precisamente la dinámica constante de crecimiento; y además cuantos más hay, más complicado es seguir mejorándolo, claro.

Domus, La Quinta, Marbella Residencia, Orpea, El Carmen. Son los geriátricos que hay en la ciudad. Junto con Aspandem dieron ayer las gracias al Ayuntamiento y a la Junta de Andalucía.

Tenía que llegar el momento. Y miren ustedes, aquí no valen polémicas ni medianías. Falleció mucha gente durante los dos primeros meses de la pandemia del COVID-19 sobre todo en las residencias. Pero aquí no. Ni una en los geriátricos. “Por suerte” cabría añadir. Pero igual fue por un buen trabajo hecho ¿no? Así lo entienden esos geriátricos al menos. No dudaron en decirlo claramente, con nombres y apellidos. Hay datos que algunas veces sí, son irrefutables.

Fue en el palacio de congresos Adolfo Suárez. Allí, donde hace un poco menos de tres años se hacía fila para algún que otro control, se escenificó el “Gracias”, con pellizco incluido para los que entonces y ayer estuvieron. Costó también después encabezar de nuevo la crónica de los hechos con la palabra “CORONAVIRUS” como titulaba todas aquellas.

No parece tan difícil.

Lo bueno es que el turista alemán es de los que le gusta el golf. Lo bueno también es que la Costa del Sol, junto con Florida, en Estados Unidos, es el lugar con más campos de golf del mundo. Lo malo es que lo que podría ser la guinda del pastel de la recuperación del visitante germano no llegará hasta septiembre con la Solheim Cup 2023.

Pero de la ITB se trae de todas formas el Ayuntamiento de Marbella la sensación de que este año ocurrirá lo que no sucedió el pasado y el mercado teutón, el segundo más importante europeo tradicionalmente para la zona, volverá a los niveles prepandemia, con el objetivo de incluso superarlos, como han conseguido el resto de países emisores de viajeros.

A eso ayudaría sin duda que también se recuperen vuelos directos con el aeropuerto Pablo Ruiz Picasso de Málaga que también por mor del COVID dejaron de fletarse. Si ponemos, si ponen, todos de su parte, será más fácil.

Primer test importante, dentro de 18-24 días.

No parece tan difícil.

El macabro crimen del 8 de enero pasado acabó con unos largos, esperanzadores y, ¿por qué no?, buenos 17 años. Todo ese tiempo había pasado en Marbella sin que hubiera una víctima de VIOGEN. La mujer colombiana mutilada y decapitada, seguro que lo recuerdan, abría el cuaderno de la violencia de género, cerrado desde 2006 en Marbella.

Hoy es el Día de la Mujer, no el de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, pero es inevitable la asociación de ideas. Y no está de más si encima el escenario es, como decíamos, bueno o no malo del todo, por lo menos. En Marbella.

Al mismo nivel resaltamos que no se debe bajar la guardia, ni dejar de destinar recursos. Porque el Ayuntamiento sigue recibiendo consultas relacionadas con esta lacra. Y también sobre la formación, yendo ahora al meollo de la cuestión. No en vano, esta efeméride tuvo durante años el adjetivo de trabajadora.

Así que, tirando de tópicos que como ésta, muchas veces lo son por algo, hay que seguir luchando. También en Marbella.

No parece tan difícil.

Llega hoy la primera de las tres jornadas clave que tiene por delante Marbella de cara a su principal fuente de ingresos.

Comienza la ITB. Es una de las principales o más importantes citas turísticas del mundo, que además lleva desde 2019 sin celebrarse, porque ya canceló su edición de 2020 viendo lo que se venía encima. Añadan que, como adelantamos hace unas semanas, el visitante alemán es el único de los habituales que no ha recuperado del todo la ciudad; aun son menos los que vienen de los que lo hacían antes de la pandemia. Y la razón ciertamente es sorprendente por tratarse de un país como Alemania: España y sobre todo Marbella es caro para ellos.

¿Por dónde va tirar la ciudad para recuperarlos? En eso no hay cambios: lo mismo de siempre, que es lo que siempre ha resultado, quitando este retraso del que hablamos y que obedece a otras causas, como explican los profesionales.

No parece tan difícil.

Otra vez las playas de Marbella están a la cabeza de los títulos de crédito. Pero en esta ocasión no es por los espigones. Bueno, no en su parte principal. Tampoco por los efectos de algún temporal. Llega este lunes la de San Pedro Alcántara en concreto por una sugerencia hecha por APYMESPA, el colectivo que agrupa a las pymes de la localidad y que es de hecho el único ahora mismo con cierta fuerza social y vecinal, además de la lógica empresarial.

Y es una petición que, o no ha tenido demasiada publicidad hasta el punto de no sonarle a casi nadie, o directamente no se le dio en el momento en que se propuso al equipo de Gobierno. Y esto queda en el debe. Porque según nos cuentan, no es de hoy ni de anteayer que se dice. Se planteó allá cuando el Ayuntamiento abrió ese proceso de participación para que se plantearan ideas de cara al avance del ahora llamado Plan General de Ordenación Municipal. De la fase de avance, repetimos y subrayamos.

¿De qué se trata? De que un embarcadero o marina termine de darle a la playa sampedreña la prestancia que tendría de estar en condiciones, para lo cual, y aquí está esa pequeña parte que sí aparece de nuevo, son casi imprescindibles los espigones. Pero sólo casi.

No parece tan difícil.

No sólo van quedando claras las armas y las estrategias políticas de los partidos -de los dos grandes de momento- de cara a las Elecciones Locales en Marbella. También algunas claves en la gestión del Ayuntamiento, del equipo de Gobierno. Dos concejales lo habían manifestado a estos micrófonos varias veces y ayer se sumó la propia alcaldesa, a preguntas también de Onda Cero.

Participaba la regidora en un encuentro organizado para hablar de las inversiones extranjeras en la ciudad. Tras unas manifestaciones centradas en el apartado turístico y con datos económicos en general, quisimos saber si había algún otro sector atractivo para los foráneos: el de la tecnología contestó.

La pandemia, el estado de alarma y el teletrabajo -les sonará esto de esas veces en que, decíamos, dos ediles, Cristóbal Garre y Remedios Bocanegra, lo habían manifestado- han puesto a la ciudad en la primera línea del escaparate para multitud de empresas tecnológicas. De hecho, una acaba de comprar una gran superficie de un espacio comercial en el centro de Marbella.

Las cosas buenas que el COVID ha dejado. Esto también les resultará conocido.

No parece tan difícil.

Quedan cuatro plenos ordinarios en Marbella antes de las Elecciones Locales del 28 de mayo. Y está previsto y anunciado además uno extraordinario para la aprobación inicial del Plan General de Ordenación Municipal. Quitando éste último, los restantes parece ya más que claro que van a estar marcados por unas líneas también definidas en lo que a los dos grandes partidos se refiere.

Porque conocidas las mociones que van a presentar en la sesión de mañana ambos grupos municipales, la polémica está servida. Los populares repiten con los espigones, aunque esta vez revestidos de la denuncia porque el Estado no se ocupa de las playas una vez pasado el primer temporal del año.

Y los socialistas, proponen la creación de un centro terapéutico para las adicciones, un asunto que ya mencionaron en un pleno anterior, dándole un toque más que picante con la alusión al caso del marido de la alcaldesa en la Audiencia Nacional. Las drogas, el narcotráfico y el cierre de Hacienda de Toros hace años, fueron los condimentos.

Ya les dijimos hace semanas que fueran comprando palomitas.

No parece tan difícil.

La de Las Chapas parece que no tendrá problemas y estará lista en un plazo más que aceptable, teniendo en cuenta lo que ocurre con las obras públicas. Y precisamente por todo el historial, estamos aquí ya arriesgando bastante.

Será la segunda piscina pública que tenga Marbella. Aquí vendría muy bien un silencio de esos que se llaman valorativos. Aunque ciertamente, valorar, valorar, no hay mucho. Porque a febrero de 2023, la ciudad tiene una; pública, decimos.

Luego están las dos concesiones que tiene Supera para tres más: dos cubiertas y una al aire libre. Ninguna de ellas sirven para albergar competiciones oficiales. Esto lo llevan escuchando años. Tantos como los que lleva anunciándose la que sí servirá para natación y waterpolo; la de Guadaíza o Nueva Andalucía, como prefieran. Parece, aumentando el riesgo de antes, que ahora sí marcha bien.

En la memoria de los sampedreños queda la que años ha hubo junto al campo de fútbol, y esas pistas de tenis. Ambos espacios hubieron de dar paso a un campo homologado de fútbol 7.

No parece tan difícil.

¿Cuántas veces han escuchado eso de que “lo que ocurre en Marbella no sucede en algún otro sitio”? ¿Cuántas veces nos hemos referido al epígrafe “Por increíble que parezca” y cuántos puntos tiene ya? Pues sean las que sean, aquí viene una más. Y de las buenas.

¡Ojo!, porque además ésta no es achacable al GIL. Ya pasaban cosas, digamos, extrañas antes.

Verán, la cosa es que la ciudad acaba de recuperar medio millón de metros cuadrados. Hasta aquí, tratándose de Marbella, nada demasiado raro. Pero claro, es que entre las parcelas que suman esa importante extensión están, tomen nota y mejor si lo hacen sentados, la Tenencia de Alcaldía y el consultorio de Nueva Andalucía y, sigan sentados, el lago de Las Tortugas, en tanto que, conviene matizar, es en realidad un embalse.

Y el tiempo que se ha empleado en arreglar este nuevo episodio de la historia reciente marbellí, aumenta si cabe su nivel de surrealismo: 30 años.

Mejor será quedarse pues con el final de la historia.

No parece tan difícil.