Buenas noches a muchos napolitanos que seguro aún no han pillado la cama festejando, 33 años sin ligar la liga, y sin Maradona. Dos meses de festejos se esperan, ríete tú de los 100 millones de libras del guateque del Rey Charles. Dani Ramírez sigue concentrado y sabe que Osasuna desborda ilusión y el Madrid finales ganadas. La Cartuja será otra fiesta con su momento himno.
Ese instante suele tener su aquel y a veces se chufla y el Rey aguanta, pero hay situaciones más condenables: los domicilios de Messi y Neymar en París protegidos al estilo policial por los últimos escraches de ultras. En descomposición el PSG con algún cerebro rapado viniéndose arriba.
De otra manera, Tebas y la liga española en lo alto con los datos económicos publicados ayer. Casi 5000 millones en ingresos para dejar ya casi olvidado el socavón de la pandemia recuperando el status de segundo campeonato europeo. Eso sí, no habrá barra libre de gastos, no habrá relajación en el fairplay financiero y si el Barça quiere de verdad sustanciar un Messi 2.0, tendrá que pagarle mucho menos de lo normalizado. Y sí, por recalcar, en las últimas 24 horas, tranquilidad, nadie en la entidad blaugrana se ha marcado un Costa Concordia.
Y por agendar al personal, amén de la Copa, los raquetazos del cumpleañero Alcaraz en su semifinal del Mutua esta tarde (previsible damnificado el croata Coric), por segunda vez rodaremos en el Gran Premio de Miami de Fórmula 1 (sin muros de ladrillo entre Alonso y Sainz) y un recuerdo a Tori Bowie, campeona del mundo de los 100 metros y triple medallista olímpica fallecida a los 32 años tras una vida llena de obstáculos y depresiones. Del orfanato a la gloria., porque no todo es línea recta, desafortunadamente.
