A partir de este viernes, comienzo del periodo vacacional de Semana Santa para miles de españoles, el tiempo será muy estable, ha adelantado a Ana Casals, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), quien ha añadido que esta situación provocará un "claro aumento" de las temperaturas, nocturnas y diurnas, en la Península y en las Islas Baleares.
Durante el fin de semana, las temperaturas serán ligeramente más altas que los normales para estas fechas en amplias zonas de Andalucía, en el valle del Ebro, Extremadura, centro peninsular y en el País Vasco.
En ciudades como Madrid, el ascenso de los valores los próximos días será notable partiendo de los 19 grados de este miércoles hasta los 27 grados del martes y en Sevilla, se pasará de los 27 grados también desde este miércoles los a los 30 grados que se alcanzarán el lunes próximo. En otras capitales como Zaragoza y Toledo la progresión de la temperaturas también será acusada con máximas en torno a los 27 grados.
El jueves las diurnas subirán en la mitad norte y zona centro peninsular mientras que en Andalucía, Murcia y las Islas Canarias iniciarán una bajada. Todas las provincias salvo Ávila, Bilbao, Burgos, San Sebastián, Logroño, Málaga, Oviedo, Palencia, pamplona, Santander, Soria, Segovia y Vitoria, pasarán de los 20 grados; cabe destacar que en Córdoba y Sevilla se alcanzarán 27 y 26 grados respectivamente. Las nocturnas volverán a ser muy fría en capitales como Lugo con 1 grado bajo cero y en Soria, Palencia, Salamanca, Segovia y Ávila con 1 y 3 grados; en el centro peninsular Madrid alcanzará una mínima de 9 grados.
El viernes el calor será protagonista en gran parte de la Península, excepto en el litoral cantábrico, Andalucía y norte del área mediterránea, donde se mantendrán con pocos cambios; para esta jornada la Aemet mantiene activada la alerta naranja en Cádiz por rachas fuerte de viento.
En las Islas Canarias, la primera parte de la Semana Santa estará determinada por viento de componente norte a oeste lo que provocará aire húmedo que dará lugar a nubes bajas en el norte y oeste de las islas con temperaturas relativamente frescas durante estos días aunque de momento no se prevén lluvias.
A partir del lunes y del martes de la semana próxima, la "incertidumbre aumenta considerablemente" por la evolución de una borrasca aislada que se situará entre el centro del Atlántico norte, las Islas Canarias y el oeste peninsular. Sin embargo,-ha señalado Casals- el escenario más probable sitúa a esta borrasca lejos de las costas, lo que supondría la continuación del tiempo estable en general, aunque con viento del noroeste sobre el Cantábrico y los Pirineos que dejaría posibles lluvias débiles y un descenso de las temperaturas en esas zonas.