Su nuevo trabajo, 'Cartas de amor con faltas de (h)ortografía' supone el primer capítulo de su trilogía 'De lo constante a lo vacío'. Este primer capítulo recoge ocho canciones escritas como si fueran cartas imperfectas: confesiones directas, nocturnas y vulnerables, donde los errores ortográficos no se corrigen porque forman parte de la verdad. Con una base de soul y pop contemporáneo, el disco encuentra equilibrio entre lo íntimo y lo luminoso, lo confesional y lo coreable.