Un niño de tres años de edad ha fallecido en el municipio pontevedrés de Porriño después de pasar varias horas olvidado en el interior de un vehículo estacionado en un aparcamiento de tierra de Relva, en la parroquia de Torneiros, en un día marcado por el sol y con altas temperaturas.
Un particular dio la voz de alarma al 112 alrededor de las 16:50 horas solicitando asistencia sanitaria para un niño, por lo que se alertó a los Servicios de Emergencias Sanitarias, a los agentes de la Guardia Civil y a la Policía Local de Porriño, y también se informó a los miembros del Grupo de Intervención Psicológica en Catástrofes y Emergencias, dependiente del Colegio Oficial de Psicología de Galicia.
Sin embargo, los servicios médicos desplazados por el 061 solo pudieron confirmar la muerte del niño, que se encontraba dentro del coche. La Guardia Civil ha confirmado el fallecimiento del menor y señala que, a falta de una autopsia, la muerte podría deberse a un golpe de calor, aunque se ha abierto una investigación correspondiente.
Fuentes consultadas por Europa Press explican que al parecer, la madre del niño se despistó y se dirigió a su lugar de trabajo sin dejar al niño en el centro en el que debían cuidarlo. Cuando el padre acudió por la tarde a buscar al niño al centro, saltaron las alarmas.
El Ayuntamiento de Porriño, de donde son vecinos, trasladó sus condolencias y puso a disposición de la familia los recursos que puedan necesitar.
