El Gobierno gallego estipulaba en las 11.00 h de la mañana del día 1 de enero la apertura de la hostelería para evitar las aglomeraciones en la madrugada de Año Nuevo.
Los hosteleros del ocio nocturno, por su parte, denuncian que debido a estas restricciones se incrementarán el número de fiestas ilegales en Fin de Año. Samuel Pousada, presidente de la Federación gallega de Empresarios de Discotecas y Salas mantiene que esta Navidad "se multiplicarán las fiestas ilegales".