Prorrogado el concierto social para la prestación de servicios a personas con diversidad funcional en el ejercicio de 2021 a la Asociación de Personas con Diversidad Funcional ADIS

La Asociación de Personas con Diversidad Funcional ADIS se ha hecho acreedora de esa renovación del concierto social con la administración autonómica en dos de los ámbitos en los que trabaja y en los mismos términos que en el año recién concluido que fueron aprobados por Resolución de 24 de abril de 2020, de la Vicepresidencia y Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas. Por un lado obtiene 288.237 euros para su Centro de Día ubicado en Orihuela desde 2015 y que atiende a veinte usuarios afectados de diversidad funcional de toda la comarca. Asimismo su Centro de Atención Temprana se ve dotado con otros 188.650 euros para la atención de menores de cero a seis años de la Vega Baja (en este caso 35 plazas concertadas). Entre ambos servicios la administración autonómica dota a ADIS con un total de 476.887 euros.

De este modo la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas renueva su confianza en la asociación para el tratamiento de estos usuarios en base a los parámetros fijados desde el departamento autonómico y que son de obligado cumplimiento para las entidades beneficiarias de ese concierto social. Entre otros figura la calidad en la prestación de servicio, cumplir la ratio estipulada por la administración valenciana en cuanto a profesionales/usuarios y otros estándares establecidos por la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas como los años de experiencia acreditados en este sector, contar con instalaciones adaptadas a lo que regula la legislación vigente o que sus profesionales cumplen con lo establecido por la administración.

La presidenta de Adis, Lourdes Pérez, ha resaltado que la prórroga del concierto social para este año implica el compromiso financiero de la Generalitat “con entidades como Adis para la prestación de este tipo de servicios a personas con diversidad funcional”. Asimismo incide en que la prórroga del mismo “es la salvaguarda para que nuestros usuarios, y por ende sus familias, no se vean afectados en la atención que reciben y que no persigue otra cosa que ahondar en la inclusión social de personas con diversidad funcional”.