El Léleman Conqueridor Valencia ha logrado su primer triunfo del nuevo año que acaba de comenzar al vencer por tres sets a cero a Unicaja Costa de Almería. El conjunto de Fabián Muraco ha resuelto con solvencia su primer encuentro de 2023 tras el parón navideño con uno de los mejores partidos de los valencianos en lo que va de campaña con unos inspiradísimos Monfort y Amorim.
Conqueridor Valencia volvía tras unas pequeñas vacaciones con un enfrentamiento directo ante su más cercano perseguidor en la clasificación liguera, Unicaja Costa de Almería. El equipo andaluz, que ha ido de menos a más en el primer tramo, viajaba con muchas ganas a la capital del Turia, pero el equipo valenciano tenía a su afición ávida de voleibol y los de Muraco mandaban desde el inicio. Sin embargo, en los compases finales del primer parcial, la experiencia de los ahorradores cambiaba las tornas en el electrónico hasta poner contra las cuerdas a los valencianos. Al borde del abismo apareció Javi Monfort para, con dos bloqueos seguidos, dar la vuelta al set y cerrarlo para los hombres de Muraco (27-25).
A partir de entonces, Conqueridor no dio opción alguna al equipo de Manolo Berenguel. Con una alta eficacia en recepción y defensa, los valencianos se apoyaron en un gran Javi Monfort y en un inspirado Amorim para poner tierra de por medio en el marcador y afrontar el segundo set con tranquilidad. Precisamente sería Amorim quien, desde el saque marcaría las diferencias y daría la ventaja necesaria para cerrar el segundo parcial y asegurar el primer punto para los locales (25-18).
El tercer set fue, de nuevo, un ejemplo de cómo se debe jugar al voleibol. Maxi Scarpin y Facundo Funes se sumarían a la fiesta organizada por Vicente Monfort, que logró una gran efectividad en el ataque para sus compañeros de equipo. La seguridad de los valencianos aumentaba conforme se despegaban en el tanteador y así, con un saque directo de Postemsky, llegaría la primera victoria de 2023 para Conqueridor y los tres puntos para continuar en la quinta plaza y alejar a sus perseguidores.
