Más de 200 efectivos de la Policía Nacional y de la Policía Local se movilizarán este martes para evitar posibles incidentes en las celebraciones que se puedan producir después del partido entre las selecciones de España y Marruecos, en los octavos de final del Mundial de Qatar 2022.
El dispositivo, calificado como "preventivo especial de seguridad conjunto", pretende velar por la seguridad entre las dos aficiones, dada la presencia de miles de marroquíes en ambas localidades, y evitar así posibles incidentes, disturbios y actos incívicos.
Las unidades que van a formar parte de este dispositivo son la UPR, GOR, Brigada Móvil y Servicio de Protección y Seguridad Aérea (drones) de la Policía Nacional, así como el Grupo Operativo de Intervención Rápida (GOIR) y las unidades de Tráfico, Barrios y USEC de la Policía Local de Elche y Alicante. Todas ellas estarán repartidas por las dos ciudades con mayor población de la provincia, con especial atención a las zonas donde preventivamente se concentran los aficionados.
Los dos cuerpos de Policía -Nacional y Local- han mantenido contacto desde que se dio a conocer este cruce, que dará comienzo el martes a las cuatro de la tarde. Desde media hora antes ya estarán las unidades en las calles y se reforzará, una vez que termine el encuentro, desde las seis de la tarde.
La Policía ha querido dejar claro que el dispositivo tiene "carácter preventivo con el objetivo de evitar comportamientos incívicos que puedan producirse, así como asegurar que no se produzcan incidentes entre aficiones". Ambos cuerpos de seguridad cuentan con experiencia y coordinación de dispositivos conjuntos, y este operativo buscará "prevenir y anticiparse a cualquier posible altercado". También participarán las unidades de tráfico por si hay que realizar desvíos o regularlo, sobre todo en la plaza del Mar de Alicante, donde en otras ocasiones los aficionados han acudido a celebrarlo. En Elche habrá especial vigilancia en el centro y los barrios de Carrús y El Toscar.
La Policía advierte que está prohibido el uso de bengalas y cohetes, y se hace un llamamiento a evitar su utilización, ya que en otras celebraciones han producido quemaduras y lesiones, llegando a ocasionar daño en el mobiliario público.
