Una investigación liderada por el Instituto de Neurociencias de la Universidad Miguel Hernández de Elche ha probado una molécula experimental que se activa al aplicar luz azul y que podría aliviar los síntomas del ojo seco.
Desde el instituto de investigación, que es centro mixto del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, se ha destacado que "es la primera vez que se demuestra que una molécula fotosensible puede controlar la actividad nerviosa de la córnea mediante luz".
El estudio ha estado liderado por el investigador Víctor Meseguer y ha demostrado que una molécula sensible a la luz (llamada DENAQ) puede modular la hiperactividad nerviosa al aplicar luz azul, reduciendo las señales anómalas sin eliminar la sensibilidad normal al frío: “Lo más interesante es que la luz no bloquea la función de estos nervios, sino que la devuelve a la normalidad. En condiciones de ojo seco, las terminaciones están disparando de forma exagerada, y en presencia del optofármaco, con la luz conseguimos que su actividad vuelva a niveles saludables”, ha señalado Víctor Meseguer.
Por otro lado, la investigación aporta una "nueva comprensión" de los mecanismos moleculares de los receptores de la cornea y “refuerza” la idea de que se puede controlar la actividad nerviosa periférica "de forma localizada, precisa y reversible, usando fármacos sensibles a la luz".


