El vicepresidente del Govern y conseller de Transición Energética, Sectores Productivos y Memoria Democrática, Juan Pedro Yllanes, ha insistido este jueves en la posibilidad de reformar la Ley de Cambio Climático para "ser más ambiciosos y ante la falta de tiempo para cumplir los objetivos".
En declaraciones tras presidir junto a la presidenta del Govern, Francina Armengol, la reunión del Consell Balear del Clima, el conseller se ha referido a la petición que hizo en el Parlament al resto de grupos parlamentarios para que se sumen.
De este modo, Yllanes ha recordado los objetivos de la norma sobre la reducción del consumo energético así como de la utilización de energías renovables.
Durante la reunión del Consell Balear del Clima, el director general de Energía y Cambio Climático, Pep Malagrava, ha presentado el borrador del Plan de Transición Energética y Cambio Climática, que establecerá los objetivos, políticas y acciones para cumplir con la Ley de Cambio Climático. El fin es reducir hasta un 40% las emisiones contaminantes en las Islas hasta 2030.
Así, Yllanes ha apostado para que tanto la administración como la sociedad balear trabaje en la implementación de este plan. "Hoy hemos conocido que ya se ha consumido todo aquello que somos capaces de producir", ha afirmado.
En este sentido, el conseller ha abundado en que en cuestión energética hay un mandato "muy claro" para blindar energéticamente las Islas y ser autosuficientes en la producción de energía limpia. "Tenemos el compromiso de cumplir con los acuerdos internacionales", ha recordado.
"No tenemos tanto tiempo, tenemos que cumplir una serie de objetivos que la Ley nos impone de reducción de la movilidad, de gases de efecto invernadero y eficiencia energética", ha subrayado, para después aseverar que se deben conseguir antes de 2030: "Debemos hacer un esfuerzo porque 2030 es pasado mañana".
Yllanes se ha referido al Consell Balear del Clima como "la sede idónea" para implementar estas políticas y, a partir de aquí, desarrollar el Plan de Transición Energética en Baleares.
A continuación, el director general de Energía ha explicado que se ha presentado un calendario para la aprobación de este plan, que seguramente será en el primer trimestre de 2023. Además, ha indicado los cuatro pilares fundamentales: estabilización y decrecimiento de la demanda eléctrica; adopción de criterios de economía circular; resiliencia a los impactos del cambio climático; y conocimiento, tecnología e innovación.
Para llevarlos a cabo, Malagrava ha explicado que se han incorporado una serie de grupos de trabajo para ahondar en este Plan de Transición Energética y Cambio Climático, en los que la gente puede aportar. "Ahora abriremos una ronda de reuniones para hablar con las organizaciones y agentes sociales para saber qué se debería incorporar", ha indicado.
Asimismo, habrá también una consulta con asociaciones ecologistas, patronales, sindicatos y partidos políticos y se harán talleres en las cuatro islas para hacer un Plan a diez años vistas con una revisión a los cinco años.
"No nos queda tiempo para actuar", ha subrayado Malagrava, quien ha puntualizado que la eficiencia energética viene por "consumir menos energía y que ésta pase de ser fósil a renovable".
Según este Plan, el primer objetivo es reducir las emisiones un 40% para el año 2030, para llegar a la neutralidad climática en 2050. Así mismo, la reducción del consumo primario tiene que bajar un 26% para el año 2030 y hasta un 40% en 2050.
Por otro lado, el Plan prevé cuotas quinquenales de penetración de energías renovables, por tecnologías, a fin de lograr progresivamente los objetivos siguientes, definidos como proporción de la energía final consumida en el territorio balear: el 35% para el año 2030 y el 100% para el año 2050. Estos objetivos se tienen que ajustar a las particularidades de cada isla.
Por último, el vicepresidente ha comentado el informe presentado este miércoles por BBVA, en el que prevé un crecimiento de la economía balear de un 7,3% en 2022 y de un 5% en 2023. Sobre esto, Yllanes ha valorado las cifras de crecimiento después de dos años "muy complicados" para la población de Baleares.
No obstante, ha remarcado que desde el Govern se debe hacer un planteamiento "muy serio" sobre cuál debe ser el futuro de las Islas y cómo se puede combinar el crecimiento económico con la protección del territorio para las generaciones futuras.