Cáritas Diocesana de Ibiza ha presentado su memoria anual 2024, en la que se constata una leve bajada del 8% en el número de personas atendidas con respecto al año anterior aunque sin embargo, el coordinador de la entidad, Gustavo Gómez, ha explicado en Onda Cero Ibiza y Formentera que “se ha asistido a cerca de 3.000 personas”.
En este sentido, Gómez ha advertido que la pobreza en Ibiza tiene un carácter “estructural” y que ni siquiera los ciclos de bonanza económica logran aliviar de forma real la situación de muchas familias. “No es de recibo que una persona trabaje 40 horas semanales o más y tenga que venir a Cáritas porque no pueda permitirse llenar la nevera y es que desgraciadamente factores como el encarecimiento de la cesta de la compra y el precio desorbitado de los alquileres están generando una tormenta perfecta que ahoga cada vez a más personas”.
Concretamente, en 2024 Cáritas ha repartido más de 80.000 kilos de alimentos, una cifra que Gómez califica de “tremenda para una isla del lujo como Ibiza” y por ello ha agradecido la colaboración tanto de administraciones como de empresas y particulares. “La sociedad ibicenca está cada vez más comprometida y eso nos permite no tener que lanzar demasiados llamamientos de urgencia”.
Uno de los datos más llamativos del informe es el aumento de personas españolas que acuden a Cáritas, superando este año el 24% del total de atendidos, una cifra superior a la registrada en años anteriores. “Suelen ser personas que inicialmente contaban con más recursos, pero que los han agotado, y desgraciadamente terminan necesitando ayuda para continuar en la isla”.
Incluso, en cuanto al perfil de los beneficiarios, el reparto está equilibrado entre hombres y mujeres, con una mayoría que busca salir de la situación en la que se encuentra y por ello, Gómez ha puesto en valor especialmente el trabajo del área de empleo y del centro Betania, donde se ofrece formación y acompañamiento para la inserción laboral.
