La empresa Tauroemoción apremia al Ayuntamiento de Huesca para que busque soluciones y que la ciudad no se quede sin feria taurina por segundo año consecutivo. Asegura que sí existen fórmulas legales para organizar estos festejos que consideran imprescindibles para que la tradicional feria laurentina no corra peligro.
La empresa va a estudiar la decisión municipal basada en los informes jurídicos elaborados por los técnicos del Ayuntamiento y, previsiblemente, pedirá la suspensión del contrato para que el primer año de gestión sea en 2022. Defiende que se pueden organizar eventos y para ello, toma como ejemplo la organización de cualquier concierto para el que el consistorio cede el uso de la plaza de toros sin generar tanto revuelo.
Alberto García ha explicado asimismo que en otras ciudades como Burgos, en situación similar a la de Huesca, el Ayuntamiento sí ha aceptado la celebración de festejos taurinos. Cree que hay buena disposición por parte del ayuntamiento oscense pero recuerda que el tiempo corre en su contra.
Incide en que la celebración de la feria supondrá un revulsivo económico para la ciudad, ya que el programa atraerá a aficionados de Francia y de otras provincias de España.
