Uno de cada cuatro jóvenes aragoneses, el 25% entre 16 y 25 años, estuvieron en 2024 expuestos al juego y esto fue asociado, en ocasiones, a un aumento de problemas relacionados con las apuestas online y publicidad. En España, el año pasado se jugaron 33.847 millones de euros según el Consejo Empresarial del Juego y todos estos datos han llevado a que desde el Instituto de Investigación Sanitaria Aragón y la Asociación Aragonesa de Jugadores de Azar en Rehabilitación se busquen estrategias para mejorar la prevención.
Hace años que las dos instituciones están colaborando en esta línea, pero ante estos datos que van en aumento, han puesto en marcha varias iniciativas. Una de ellas, como explica Yolanda López del Hoyo, miembro del ‘Grupo de Investigación en Salud Mental’ e investigadora y catedrática en la Universidad de Zaragoza, es el proyecto “GAMBL-OUT” que se desarrolla en centros educativos de forma presencial. Se ha diseñado un scape room en una plataforma con el objetivo de dar a conocer a los jóvenes los efectos y conductas que hoy en día hay sobre el juego.
Se trata de una experiencia inmersiva en la que los participantes tienen que salvar a Lucas, un adolescente como ellos que tiene problemas relacionados con el juego de apuestas. Han de resolver desafíos y retos que, como indica López del Hoyo, pretende enseñarles cómo es el proceso de enganche al juego, las técnicas que utilizan las casas de apuestas o de tragaperras para captar y que se sigua jugando, se les explica los métodos y técnicas que se utilizan para hacerles creer que ganan dinero.
El juego se está convirtiendo, como explican desde estas entidades, en un problema de salud pública y los jóvenes entran en este círculo cada vez a edades más tempranas porque son más vulnerables. Por su edad, explica Yolanda López del Hoyo, están más abiertos a las nuevas experiencias y tienen mayor nivel de hacer casos a sus impulsos.