El presidente del Colegio de Médicos de Huesca y sanitario en el medio rural, José María Borrel, ve con buenos ojos la posible medida de retener a los MIR con contratos de hasta tres años y formación continuada de cara a conseguir que se queden en el territorio y frenar el déficit de facultativos, sobre todo en el medio rural.
Muchas comunidades autónomas trabajan en la misma línea para fidelizar a los médicos residentes, tanto del ámbito de la atención primaria como especializada. Y es que, en Aragón, casi 300 médicos de familia alcanzarán la edad de jubilación entre este año y 2027. Desde el Colegio profesional de Huesca, José María Borrel comparte que una de las medidas pasa por ofrecer contratos estables que permitan a los jóvenes asentarse en el territorio.
Pero el presidente del órgano colegial considera que no solo hay que revisar los contratos de los jóvenes residentes sino de todos los facultativos porque muchos de los profesionales están adelantando su jubilación fruto de las malas condiciones laborales. En este sentido, advierte que solo con los MIR que se incorporen no se podrán cubrir todas las plazas que quedarán vacantes con las jubilaciones.
El mismo ha recordado que la atención primaria, sobre todo en el medio urbano, sigue estando muy presionada. Su trabajo diario se centra en atender la demanda diaria de los pacientes relegando a aquellos crónicos o con otras patologías que, aunque no sea de forma urgente, también requieren de su atención o revisión.
