En la Audiencia de Zaragoza ha comenzado el tercer juicio contra la banda de Badoo, por delitos de robo con violencia y lesiones, detención ilegal, y extorsión en grado de tentativa de los que fue víctima un vecino de Tudela. Los acusados, Mohamed Achraf y Candy Aguirre, le contactaron a través de la red social usando a la chica de gancho, y se citaron con él en Luceni el 4 de septiembre de 2019. Le robaron 650 euros en efectivo, un reloj o unas gafas, entre otros efectos personales. La Fiscalía pide 10 años y 9 meses de prisión.
Declaran los acusados
El acusado ha reconocido que golpearon, maniataron y amenazaron a la víctima. Lo trasladaron metido en el maletero del coche hasta una nave y le exigieron las contraseñas de sus cuentas, además de los números de teléfono de sus familiares para pedir un rescate. La víctima les convenció de que ni él ni su familia tenían dinero y finalmente lo liberaron en un campo. El principal acusado ha asegurado que planeó y ejecutó este plan con su entonces pareja, Candy Aguirre, pero ésta ha asegurado que no participó en los hechos.
Aguirre, además, ha asegurado que fue contratada para cuidar de los niños por el acusado y durante ese tiempo recibió amenazas y palizas por parte de Aschraf, negando que existiese una relación sentimental entre ambos. El acusado, de hecho, llevaba brazalete y tenía dos condenas por violencia de género previas.
La víctima arrastra problemas psicológicos
La víctima sufrió rotura de peroné y una herida en la cabeza. Tardó 197 días en recuperarse y todavía arrastra secuelas psicológicas. Ha reconocido a los dos acusados sin género de dudas y en su declaración, ha afirmado que temió por su vida.
Condenas anteriores
Los dos miembros de la banda de Badoo usaron el mismo modus operandi para robar y atacar a otros hombres. Ya fueron condenados a 34 años de cárcel por el asesinato de un informático vasco, al que enterraron vivo en Luceni - dos días después de los hechos juzgados ahora - y a otros 12 años y medio por el secuestro de un vecino de La Almunia. En cualquier caso, en base a la ley, los condenados no estarían en la cárcel más de 25 años, según ha recordado la abogada de Aschraf, Carmen Sánchez.
