La UEFA pide a las ligas que envíen su planificación antes del 25 de mayo

La UEFA ha enviado a las 55 asociaciones miembro las directrices que deben seguir para elegir qué equipos disputarán competiciones de clubes la temporada 2020/21. Y para conocerlos, se debe resolver la actual temporada, ya sea disputando los partidos pendientes o dándolas por finalizada prematuramente, algo que ya ha anunciado Holanda. Las federaciones deben enviar la lista de equipos designados para competir en las próximas competiciones continentales de clubes. Según la documentación enviada por la UEFA, el primer punto indica que la admisión "se basa en el mérito deportivo", por lo que insta a las asociaciones y ligas "explorar todas las opciones posibles" para dar un final natural a los torneos domésticos.

El segundo punto, que antes del 25 de mayo las asociaciones y ligas tienen que informar a la UEFA de cuál será la planificación sobre la reanudación de las competiciones, comunicar la fecha en la que se volverá a disputar y el formato que se aplicará. No obstante, señala que mientras se trata de completar las competiciones nacionales, las asociaciones y ligas pueden "tener motivos legítimos para poner fin prematuramente a sus competiciones" por "la existencia de una orden oficial que prohíba los eventos deportivos para que las competiciones nacionales no puedan completarse o que sea muy improbable que se completen antes de una fecha que permita completar la temporada actual a tiempo". Entiende que pueden existir "justificaciones económicas y financieras específicas que harían que la reanudación de la temporada" fuera "imprudente" o que "pudiera poner en riesgo la estabilidad financiera a largo plazo de la competición nacional y/o clubes".

En el caso de que una competición no se pueda disputar por razones legítimas, la UEFA exige que antes de el 25 de mayo se explique las circunstancias que derivan en dicha decisión y defina los clubes que participarán la próxima temporada "sobre la base del mérito deportivo" de la presente campaña. El máximo organismo europeo señala que el procedimiento de selección de los equipos "debe basarse en principios objetivos, transparentes y no discriminatorios. Las Federaciones Nacionales y Ligas, por lo demás, deben tener la capacidad de decidir las posiciones finales en sus competiciones domésticas, teniendo en cuenta las circunstancias específicas de cada competición".