José Ramón de la Morena: "Es curioso que en las ligas europeas a falta de 5 o 6 jornadas ya esté decidido el campeón"
Es curiosa la metamorfosis que se está produciendo en las ligas europeas, con los equipos grandes y que a falta de 5 o 6 jornadas ya esté decidido el campeón.
Ocurrió ayer en Inglaterra, donde el City llevaba una ventaja de más de 15 puntos al United, que perdió, y el City ya es campeón. Y también en Francia, donde anoche el PSG goleó al Mónaco, al segundo clasificado, y se hace con el título de Liga a falta de 5 jornadas para el final.
En Alemania ocurrió lo mismo hace unos días con el Bayern, en España se da por supuesto el título para el Barça con esos 11 puntos que le lleva al Atlético de Madrid. Es mucha la diferencia de presupuestos entre los equipos grandes y los humildes, que los contratos de televisión hacen aún mayor, a pesar de este último decreto que lo ha igualado un poco.
Pero en Segunda División, que las condiciones económicas están más parejas, porque los que descienden van con el miedo a la quiebra y los que ascienden llegan con los inversores y accionistas ilusionados con llevarles a primera, pues se produce un equilibrio tal, que la segunda división se convierte en la competición más igualada y emocionante de toda Europa.
Ahora mismo los once primeros equipos clasificados tienen serias posibilidades de subir a Primera. Y de los 8 últimos, cualquiera de ellos puede bajar a Segunda B. Eso hace la competición más emocionante y apasionada que se haya visto en los últimos años, y creo que es por la similitud de presupuesto y porque los derechos de televisión están repartidos de manera muy horizontal. El modelo no es válido para Primera porque Real Madrid, Barça, Atlético de Madrid, Valencia y Sevilla, según datos oficiales de La Liga, son el mayor reclamo de las televisiones.
Y esos porcentajes son los que marcan principalmente el reparto del dinero televisivo, mientras que a la Segunda División llegan las migajas que caen de la mesa opulenta de Primera, es cierto que las migajas cada vez son más grandes, pero ese reparto la convierte en una competición apasionante. Reconozcámoselo.