Director de Próxima Energía, Jorge Morales de Labra, explica en La Brújula cómo puede beneficiar a España la condición de "isla energética" que se ha acordado esta tarde en el Consejo Europeo: "Es una gran noticia después de muchos meses en los que no podemos pagar ni empresas ni familias. Ahora lo que hace falta es que el Gobierno legisle. Las centrales que queman gas para producir electricidad van a tener un precio limitado, un precio de preferencia y por tanto no van a poder ofertar al precio que ellos quieran".
Explica que las eléctricas han tratado de anticiparse a este movimiento para que sean, sobre todo las empresas de gas, las que vean sus beneficios reducidos: "Lo que está intentado las eléctricas es destapar los beneficios caídos del cielo de las empresas de gas. La mayor parte del gas que entra en España entra por un gaseoducto que viene de Argelia. Ese gas está al precio del petróleo. Esa empresa está teniendo pingües beneficios porque vende su gas al precio de las demás pero con un coste mucho menor que las que traen el gas en barcos. Tratando de anticiparse a lo que ha acordado el Consejo Europeo, las eléctricas han decidido ponerse de acuerdo entre ellas para evitar que sea el gobierno el que fije los precios de esa energía."
El proyecto Midcat
Además, habla del proyecto Midcat, el gaseoducto que se quedó sin construir para que España distribuya gas a Europa: "Todo el mundo estamos inmerso en un cambio a energías renovables. Entonces ¿Tiene sentido invertir en gas cuando se podría invertir en energías renovables y dejar de consumir gas? Sería viable si se paga con fondos europeos y si además de transportar gas, transporta hidrógeno que es lo que vamos a utilizar a medio plazo".
Y para reforzar su postura, aporta un dato sorprendente: "Con paneles solares que recojan el sol que incide en la provincia de Cuenca podríamos abastecer de energía a todo el mundo durante un año."
