La Virgen de la Esperanza Macarena, además de ser una talla del siglo XVII es un símbolo de la identidad de Sevilla. Por eso, cualquier cambio en su imagen es motivo de comentarios. Esta semana la talla ha sido restaurada hasta en cuatro ocasiones, lo que ha generado la indignación y el desconsuelo de sus fieles que, tras observar los cambios, aseguran no reconocerla.
Entre los días 16 y 20 de junio, el equipo del catedrático Francisco Arquillo hizo una restauración de la Macarena que incluía "análisis radiológicos y a través de TAC así como análisis de las policromías mediante técnicas no invasivas, limpieza de las policromías y reintegración cromática de las lagunas de policromía existentes".
La hermandad de la Macarena está formada por 18.000 hermanos, por lo que los cambios no han pasado desapercibidos. De hecho, consideran que le han hecho un "daño irreparable" y que la virgen no es la misma. Multitud de comentarios en redes sociales se han hecho eco de lo ocurrido: "Habéis apagado su mirada"; "La restauración le ha quitado la vida"; "la mirada no es la de la Macarena".
Cronología de las restauraciones y una conclusión: el problema está en las pestañas
La talla ha estado durante cinco días retirada del culto. El sábado, cuando la Basílica reabrió sus puertas, comenzaron a llover las primeras quejas, por lo que se cerró, se le hicieron de nuevo unos retoques y abrió a las 18:00 horas; sin embargo, seguían sin convencer. En la noche del sábado al domingo se le hicieron unos retoques exprés y se decidió colocar la Virgen fuera del altar, junto al presbiterio "en veneración extraordinaria" a la altura de los fieles para que pudieran ver de cerca los cambios.
La clave de la restauración está en la mirada y en las pestañas. En concreto, según ha explicado Arquillo, "se ha reducido la curvatura del párpado superior y se ha ennegrecido parte de la genética externa cercana al rabillo global". Tal y como puede apreciarse en las imágenes que muestran el antes y el después, los ojos se han hecho más pequeños y en lugar de mirar al frente, la Virgen mira hacia abajo, dándole esa sensación de tristeza que perciben los fieles.
Las pestañas también han jugado un papel importante en la polémica restauración. En un comunicado, la Hermandad ha explicado que se había corregido "un efecto indeseado provocado por las pestañas sustituidas durante la intervención". También se le ha eliminado una mancha que tenía justo debajo del párpado y que era muy característico.
La Hermandad centra sus culpas en el profesor Arquillo y dos miembros de la misma han dimitido
El lunes 23 de junio por la tarde, decenas de fieles se congregaron a las puertas de la Hermandad para expresar su descontento, lo que ha obligado a la junta de Gobierno de la Hermandad a reunirse de manera extraordinaria y "pedir perdón por el daño moral y devocional" a través de un comunicado. En el mismo también han hecho un repaso de lo sucedido, destacando que la largura de las pestañas era "excesiva".
Intentaron "de manera infructuosa" contactar con el profesor Arquillo, pero al no conseguirlo "se decidió de manera errónea reponerla al culto". Cuando consiguieron contactar con él "se decidió recortar las pestañas" el sábado y por la noche volvieron a hacerle retoques, porque el sábado por la tarde no estaba lista del todo cuando se mostró a los fieles.
Una vez finalizadas todas las labores de restauración se decidió exponerla a los fieles "para que los hermanos y devotos comprobaran por sí mismos el estado de la Virgen". Asimismo, han aprobado que sea el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico (IAPH) quien realice las labores de supervisión técnica de las actuaciones que tengan que llevarse a cabo próximamente. De igual manera han dimitido el Mayordomo de Nuestra Señora de la Esperanza y el Prioste de Nuestra Señora de la Esperanza.
El obispo de Sevilla recuerda que "perdonar es divino"
El último en pronunciarse ha sido el obispo de Sevilla, José Ángel Saiz Meneses, que a través de un mensaje en redes sociales ha recordado que "perdonar es divino" y que lo más importante es que la Macarena "os quiere unidos, como hermanos, como hijos suyos, mirando al futuro, caminando en la verdad y el bien".
El periódico The New York Times también se ha hecho eco de lo sucedido, mientras que en los próximos días la Hermandad va a convocar un cabildo extraordinario para informar a los hermanos de todo lo ocurrido.