Los Mossos inspeccionan el tope del final de vía tras retirar el tren accidentado

Según han informado fuentes de la investigación, unos operarios han podido retirar el tren accidentado del final de la vía donde había chocado con el tope fijo, en un siniestro en el que han resultado heridos 56 de los 70 pasajeros, uno de los cuales permanece en estado grave con una contusión torácica.

Una vez retirado el tren, los agentes, de la división de Transportes de la policía catalana, han podido inspeccionar el tope fijo del final de vía, así como la parte frontal del tren, que había quedado bajo el primer vagón. Los agentes esperan que la inspección del tope y del frontal del vagón arroje pistas para poder avanzar en el esclarecimiento de las causas del accidente.

Paralelamente, los Mossos d'Esquadra siguen analizando el contenido de las dos cajas negras extraídas del tren accidentado, en un proceso laborioso que puede aportar pistas claves para determinar la velocidad a la que circulaba el convoy -varios pasajeros han afirmado que ya estaba frenando- y si ha habido algún fallo en el sistema de frenado.

Además, los agentes están a la espera de tomar declaración al maquinista, de 31 años y con siete de experiencia en Rodalies, que permanece ingresado con heridas de diversa consideración, ya que tras el impacto ha quedado en estado de "shock". Según ha informado hoy el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), el Juzgado de instrucción 11 de Barcelona, que hoy estaba de guardia, ha abierto diligencias en relación con el accidente, cuyas causas están investigando los Mossos d'Esquadra.

El accidente ha ocurrido hacia las 07:15 horas de la mañana cuando el convoy, de la línea R2 de Rodalies, procedente de la estación de Sant Vicenç de Calders, en El Vendrell (Tarragona), se ha encastado con el final de vía en la Estación de Francia, cuando llevaba a 70 pasajeros.

Debido al impacto, la cabina del maquinista y los primeros vagones han sufrido varios desperfectos por el efecto acordeón, lo que ha provocado lesiones al maquinista y a otros 55 pasajeros, de los que únicamente uno permanece en estado grave en el Hospital Clínic de Barcelona, con una contusión torácica, si bien no se teme por su vida.