Según un comunicado del Ministerio del Interior, se han intervenido 432 kilos de MDMA (conocido como éxtasis), 337 de anfetamina, 527 de Piperonyl Methyl Ketone (PMK), principal precursor del MDMA, cerca de 7.000 de otras sustancias precursoras y para la elaboración de "cristal", todo ello valorado en "más de 100.000.000 de euros".
La organización desarticulada tenía establecido su centro de operaciones, tanto para la producción como para la distribución de drogas sintéticas, en la comarca alicantina de la Marina Alta, en concreto en las localidades de Llíber, Teulada y Benissa.
El laboratorio estaba ubicado en una especie de garaje-búnker semienterrado y con apariencia de almacén de aperos de labranza, situado a escasos metros de la vivienda de uno de los principales miembros del grupo, en una parcela retirada del casco urbano donde no pudieran detectarse los ruidos y olores propios de la elaboración del "cristal".
Debido a la peligrosidad de las sustancias que albergaba, el laboratorio ha tenido que ser desmantelado con el apoyo de personal y medios especializados de Europol.