La Comisaría Provincial de Almería ha informado de que la operación 'Caldera' se inició después de que agentes de la UDYCO tuvieran conocimiento de la existencia de una vivienda de planta baja con anexo a dos calles que podía estar siendo usada por narcotraficantes para almacenar, preparar y comercializar importantes cantidades de cogollos de marihuana.
Según se desprendía de su investigación, en dichas actividades ilícitas estaban participando al menos dos individuos de nacionalidad española y otro marroquí, que adoptaban "medidas extremas de seguridad en sus desplazamientos tanto a pie como en vehículo".
Estas maniobras aún se acentuaban más cuando portaban partidas de marihuana dirigidas a ser depositadas en la "guardería" y se mantenían incluso en la propia vivienda, hasta el extremo de que uno de los ahora detenidos se "atrincheraba" en una habitación con un colchón en el suelo y mediante un pequeño hueco abierto en una pared vigilaba y controlaba la droga con un rifle.
Fruto de las pesquisas policiales, durante estas últimas semanas se observó como los ahora detenidos intensificaban su labor de recopilación de marihuana y como acudían a la "guardería" con asiduidad para depositarla allí y envasarla para su pronta partida.
Tras varias semanas de investigación y con la participación de una docena de agentes de la Policía Nacional, se desplegó un amplio operativo en el que se realizó el registro domiciliario. Los agentes detuvieron a dos hombres e intervinieron seis sacos de cogollos de marihuana envasada al vacío con un peso de 40 kilogramos, 197 plantas en plena fase de crecimiento y un rifle calibre 6,5 x55 mm. que había sido robado en la localidad granadina de Padul.
También fueron intervenidos 43 cartuchos del mismo calibre, cinco envasadoras al vacío, dos básculas, 20 transformadores, 19 lámparas, útiles para el cultivo y envasado de la droga y 840 euros en metálico.
Los dos detenidos, acusados de los presuntos delitos de tráfico de drogas, pertenencia a grupo criminal, tenencia ilícita de armas y defraudación de fluido eléctrico, han sido puestos a disposición del juzgado de instrucción de guardia, que ha ordenado el ingreso en prisión uno de ellos.
Las investigaciones continúan abiertas y no se descartan nuevas detenciones.