Euskadi no prevé limitaciones de suministro de gas de cara al próximo otoño-invierno, pero "tenemos que reconocer que esta realidad nos va a impactar, como poco, en el incremento de los precios", ha recordado la consejera Tapia. La administración quiere ser ejemplo para la industria y los hogares, y apelando a la solidaridad y la responsabilidad, ya se avanzan campos en los que actuar. La consejera Tapia ha desgranado por ejemplo que se analizarán elementos en los edificios e instalaciones públicas como "la calefacción, la iluminación cuando no sea necesario o instalaciones vacías, el autoconsumo renovable, hablaremos de reducir la movilidad sobre todo con reuniones que se puedan realizar de forma telemática, desplazamientos a pie o bicicleta....".
Agilización de renovables
En esta coyuntura de impulso a la transición energética, el Gobierno vasco ha optado por una excepcionalidad para impulsar la tramitación de los proyectos de renovables. Se trata de agilizar los procedimientos de evaluación de impacto ambiental para determinados proyectos de generación de energía. Es decir, menos trámites para que los parques eólicos y fotovoltaicos que están sobre la mesa, puedan ver la luz. Eso sí, Tapia ha defendido que "la medida no supone la ausencia de control de los proyectos".
Plan de movilidad eléctrica
Otro frente más para la descarbonización es el de la movilidad, y aquí en Gobierno vasco ha actualizado e impulsado su estrategia de movilidad eléctrica. Prevé una inversión de hasta 2.340 millones de euros que, según Tapia, generará un valor añadido en el empleo y la industria. El objetivo es que para 2030 el 16% del parque móvil privado sea eléctrico (hoy apenas lo es un 1%), y que también lo sean la mitad de los autobuses urbanos y 8 de cada 10 taxis.
