La Guardia Civil de Navarra, en fechas recientes, con motivo de las inspecciones que el Servicio de Fiscal y Fronteras de la Guardia Civil de Navarra realiza en establecimientos de la Comunidad foral, ha decomisado más de 61.500 refrescos en un almacén de venta al por mayor en la localidad de Aizoáin-Berrioplano, con un valor de venta en mercado de 80.000 euros, ya que no cumplían con los requerimientos de la normativa sanitaria y de protección al consumidor para comercializarse en España.
Los agentes del Servicio Fiscal y Fronteras, debido a la gran cantidad de envases que incumplían la normativa, solicitaron apoyo del servicio de Sanidad del Gobierno de Navarra que, a través de inspectores, realizaron una comprobación 'in situ' de la mercancía y de otros aspectos sanitarios. Durante la inspección el propietario no pudo aportar el registro sanitario como almacén de alimentación, ha explicado la Guardia Civil.
Por estos hechos los servicios de Sanidad Alimentaria del Gobierno de Navarra solicitaron a Guardia Civil la ejecución de un precinto cautelar del almacén hasta que este procediese a obtener la autorización correspondiente y subsanar otras anomalías detectada. Por orden del Departamento de Sanidad del Gobierno de Navarra, se realizó también un precinto de la nave como medida cautelar.
Por estos hechos se han intervenido 61.500 envases de diferentes bebidas carbonatadas y energéticas, con un valor total en el mercado de 80.000 euros, que han quedado a disposición Departamento de Sanidad Alimentaria del Gobierno de Navarra como autoridad competente.
Por las diferentes infracciones detectadas también se han tramitado denuncias administrativas al RD 1334/1999, por el que se aprueba la Norma general de etiquetado, presentación y publicidad de los productos alimentarios y RD 191/2011, sobre registro general sanitario de empresas alimentarias y alimentos.