La Junta Local de Gobierno del Ayuntamiento de València ha aprobado este viernes de manera inicial los presupuestos municipales del año que viene. Por primera vez el consistorio de la capital manejará unas cuentas que superan los mil millones de euros. Los presupuestos crecen en 96 millones respecto a los de este año –un 10,5 por ciento- por lo que son los más expansivos de los últimos años.
El alcalde, Joan Ribó, y el concejal de Hacienda, Borja Sanjuán, han explicado que el gobierno local dedicará estos presupuestos a ayudar a la recuperación económica de la ciudad tras la pandemia. Sanjuán ha dicho que estas cuentas, las más altas en la historia del Ayuntamiento, son posibles a una buena gestión económica:
El concejal de Hacienda ha explicado que un setenta por ciento del aumento del presupuesto de este año se debe al crecimiento en un 19 por ciento de las transferencias del Estado y la Generalitat. El otro treinta por ciento proviene del aumento esperado en la recaudación por impuestos y tasas. Pero el alcalde, Joan Ribó, ha querido dejar claro que ese incremento es por la mejor situación económica, y no de una mayor presión fiscal:
El capítulo de inversiones crece un 43 por ciento, con los ocho millones previstos para las obras del Palau de la Música como actuación más importante. Además se contempla por primera vez una previsión de ingresos de 60 millones para proyectos financiados con cargo a los fondos europeos Next Generation de recuperación post pandemia.
La partida de personal crece en 19 millones, destinados sobre todo a la incorporación de 234 agentes de la Policía Local. Además, el Ayuntamiento amortizará el año que viene otros 49 millones de deuda para dejar el nivel de endeudamiento a finales de 2022 en 298 millones. Eso supone 33 por ciento del presupuesto, muy alejado del 75 por ciento de límite máximo permitido.
