Las exhumaciones al Cementerio Municipal de Alicante han localizado los primeros restos de víctimas de la represión franquista en los trabajos realizados a las fosas 20 y 36, unas actuaciones que cuentan con la financiación de la Consellería de Calidad Democrática.
La consejera Rosa Pérez Garijo ha calificado de "muy positivos" los resultados que llegan de los trabajos de exhumación al cementerio de Alicante, cosa que pose de manifiesto que "si continuamos exhumando las fosas podremos recuperar los restos para los familiares".
Así mismo, Pérez Garijo ha subrayado la importancia de la colaboración entre las administraciones para desarrollar estos trabajos, además de destacar que "nos queda mucho trabajo para hacer pero seguimos avanzando en dignidad para nuestro país, porque vamos recuperando los restos de las personas que fueron asesinadas para defender nuestros derechos y libertades".
Por su parte, el alcalde de Aspe, Antonio Puerto, ha afirmado que la localización de los cuerpos "abre la esperanza que estos restos, después de los análisis de ADN, puedan corresponder a los fusilados el 1941, muchos de ellos de Aspe".
En este sentido, ha añadido que "nos abre una luz a la esperanza, que se pueda reparar esta deuda histórica que tiene nuestro país con todos los represaliados y sus familias y que puedan tener un descanso digno como desde un primer momento se merecían".
FOSA 36
Los trabajos a la fosa 36 del cementerio de Alicante, promovidos por el ayuntamiento de Aspe, se desarrollaron durante los meses de octubre y noviembre con el objetivo de recuperar los restos de 22 personas que fueron asesinadas entre el 26 de junio y el 17 de julio de 1941, mayoritariamente de la localidad de Aspe y de localidades próximas.
Los principales hallazgos a la mencionada fosa, a una profundidad de dos metros, son los restos parciales de dos víctimas, una de las cuales muestra signos de violencia al presentar un orificio de salida de bala al cráneo. En los trabajos que se están desarrollando en el laboratorio se han documentado signos de violencia en dos fragmentos de cráneo más, de forma que en principio hay tres cuerpos que muestran violencia en esta fosa.
A la vez, se están analizando en el laboratorio muestres de mandíbulas, piezas dentales, fragmentos de cráneos y fémures para hacer un estudio antropológico con el objetivo de determinar el perfil genético.
Asimismo, el estudio en laboratorio ha confirmado que el número mínimo de individuos de esta fosa asciende a 25, al documentarse 25 fémures derechos, cosa que confirma los datos de los registros que hablan de 25 personas enterradas, 22 de ellas represaliadas y 3 no represaliadas y anteriores a la fecha de los primeros fusilamientos.
La consellería de Calidad Democrática ha recordado que estas tareas se vieron dificultadas en un primer momento al constatar que se había removido la fosa, después del hallazgo de restos óseos de las víctimas que se encontraban dispersas y la aparición de huesos pequeños al relleno de la fosa.
FOSA 20
En cuanto a los trabajos de exhumación de la fosa 20 del cementerio de Alicante, que se están desarrollando en estos momentos promovidos por la asociación 'Cinco Ojos' de Aspe, se han encontrado siete cuerpos de los 14 previstos.
De los siete cuerpos recuperados, cuatro presentan signos de violencia, tres tienen orificios de proyectil al cráneo y otro al esternón. Los trabajos continúan con el objetivo de recuperar los restos de las 14 personas que fueron asesinadas entre el 26 de junio y el 9 de agosto de 1941, la mayor parte de Aspe y otras localidades como Callosa de Segura, Ibi, La Unión y Madrid.
En la provincia de Alicante alrededor de 400 personas de diferentes localidades alicantinas y también otros municipios españoles desaparecieron víctimas de la represión franquista a través de numerosas ejecuciones después de juicio sumarísimo y sentencia de muerte, ha remarcado la Consellería.