El Consorcio Provincial de Bomberos recibió anoche un aviso tras derrumbarse parte del suelo de una casa muy antigua con la propietaria dentro, que sufrió una caída y tuvo que ser atendida. También necesitó ayuda psicológica por el estado alterado de nervios en el que se encontraba.
El derrumbe del suelo dejó un boquete de un metro aproximadamente de largo y se veía a través del mismo la parte del piso de abajo que pertenece a la misma vivienda. Las vigas de toda la casa se encontraban en mal estado.
Los bomberos taparon el agujero y apuntalaron la vivienda para evitar más derrumbes. Posteriormente avisaron a los servicios municipales para que realicen una valoración del edificio.
En el operativo intervino una Unidad de Mando de Jefatura; una Bomba Urbana Ligera; un Furgón de Salvamentos Varios; un sargento; un cabo; y cuatro bomberos del Parque de Cocentaina.