Así lo ha explicado el director general de Salud Pública, Juan Camacho, que en la rueda de prensa que ha ofrecido para informar de este proceso ha explicado que el hecho de que la región vaya a recibir, de momento, solo 60.000 dosis de vacunas ha hecho al Ejecutivo regional "repensar" y corregir la estrategia.
Y es que esta distribución nacional de dosis hace que el Ejecutivo regional no pueda afrontar una vacunación "masiva" de la primera dosis a los 145.000 menores que residen en la región con entre 5 y 11 años. "No tenemos vacunas para ello ni para dar una vuelta a todos los colegios", ha admitido el responsable de Salud Pública del Gobierno castellanomanchego, que ha indicado que el ritmo de vacunación se irá acompasando al de llegada de vacunas.
Por ello, y "tras escuchar a todos y recoger todas las sensibilidades", el Ejecutivo regional va iniciar este miércoles la vacunación con unidades móviles que se van a desplazar a 20 centros escolares seleccionados de 16 municipios de más de 20.000 habitantes. También arrancará en centros de educación especial.
Camacho, que ha indicado que los alumnos de colegios cercanos podrán acercarse a estas unidades móviles para ser vacunados, ha avanzado que este miércoles también arrancará la vacunación de este grupo de edad en los centros de salud, donde se inoculará con cita previa.
Dicho esto, y tras defender que, como en la población, adulta la vacunación infantil es voluntaria, ha mandado un mensaje de tranquilidad a los padres asegurando que Sanidad no va a elaborar una lista con los nombres de los menores no vacunados, porque "no aporta nada".
"Estigmatización ninguna, voluntariedad absoluta. Nadie va a ser si se vacunan o no se vacunan", ha defendido Camacho que, no obstante, ha incidido en la necesidad e inmunizar a los menores que ahora presentan una alta tasa de incidencia.