La Comunidad de Usuarios de Aguas Subterráneas de la Masa Mancha Occidental II alerta sobre la situación “límite” de numerosos regantes de esta CUAS debido al retraso administrativo en la resolución de expedientes de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG), dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO).
En concreto, los expedientes relativos a acciones habituales y contempladas por normativa, como el paso a concesiones o modificaciones de características; solicitudes de limpiezas de pozos; ampliaciones de perímetros de riego o cambios de emplazamientos tienen una demora de cuatro o cinco años, llegando incluso algunos expedientes hasta los siete. “Estos plazos de espera no se dan en ninguna otra administración de España”, lamentan.
Este retraso administrativo provoca que los solicitantes no puedan regar mientras esperan la resolución de la CHG, con el consiguiente cese de su actividad, perdida de cosechas, imposibilidad de acometer inversiones ni proyectos agronómicos y, en definitiva, con un grave perjuicio económico para sus explotaciones. Además, este “inmenso retraso” motiva mayores irregularidades y dificultades en el uso correcto y eficiente del recurso.
Desde Mancha Occidental II señalan que en otras confederaciones hidrológicas de España se puede realizar la actividad normal desde la presentación de la propia solicitud, mediante autorizaciones provisionales. Ante esta situación van a elevar esta problemática a diversas administraciones, órganos y entidades para su denuncia.
Ampliación de la plantilla
Asimismo, exigen que se dote a la CHG con una plantilla de trabajadores acorde, pues de la labor de este organismo dependen miles de usuarios y usuarias de Mancha Occidental II y de toda la cuenca del Guadiana. En ese sentido, desde CUAS Mancha Occidental II reiteran su ofrecimiento para asumir nuevas encomiendas.
Apuntan que una mayor agilidad favorecería la generación de riqueza y empleo en el sector primario, motor socioeconómico de las localidades del ámbito de esta Comunidad, afectadas también por la paulatina despoblación por escasez de oportunidades laborales, en especial, para la población más joven.
Por último, Mancha Occidental II incide en la importancia del regadío sostenible para la generación de riqueza, desarrollo socioeconómico o fijación de población en una zona de España donde el sector agropecuario es esencial. Defienden que el agua empleada “no se usa para llenar piscinas o regar campos de golf sino para la producción de alimentos de calidad para abastecer a toda la sociedad, incluso en una época tan complicada como la actual”.