Sucesos

Desarticulada una banda que estafó 370.000 euros a cambio de anular multas urbanísticas en Mallorca

Cuatro individuos que se hacían pasar por funcionarios del Consell de Mallorca han logrado obtener 370.000 euros con la promesa de anular infracciones urbanísticas

Onda Cero Mallorca

Illes Balears | 21.03.2024 09:51

Piscina ilegal construida sobre suelo rústico, en una Área Natural de Especial Interés de Petra, y sancionada por la Agencia de Defensa del Territorio de Mallorca
Piscina ilegal construida sobre suelo rústico, en una Área Natural de Especial Interés de Petra, y sancionada por la Agencia de Defensa del Territorio de Mallorca | Agència de Defensa del Territori de Mallorca

En un operativo llevado a cabo por la Policía Nacional en Palma, han sido detenidas cuatro personas acusadas de estafa y pertenencia a un grupo criminal tras idear una sofisticada trama de engaño que involucraba la supuesta anulación de expedientes sancionadores por infracciones urbanísticas en Mallorca.

Los individuos, haciéndose pasar por funcionarios del Consell de Mallorca, aseguraban tener contactos dentro de la Agencia de Defensa del Territorio de Mallorca (ADT) que les permitían anular sanciones por infracciones urbanísticas. Según fuentes policiales, esta red delictiva logró obtener hasta 370.000 euros mediante este engaño.

La investigación reveló que los estafadores convencían a las víctimas, que habían sido sancionadas por la ADT, para entregar sumas de dinero a cambio de la anulación de las multas. Uno de los detenidos ejercía como captador y recaudador, mientras otro gestionaba el dinero recibido y realizaba trámites para simular la gestión de la cancelación de las sanciones, aunque estas eran firmes y no tenían posibilidad de recurso.

Además, se descubrió que uno de los implicados, en su calidad de arquitecto, realizaba gestiones en nombre de las víctimas para aparentar que se estaba invirtiendo el dinero en obtener la cancelación de las sanciones, cuando en realidad esto era imposible. El cuarto miembro del grupo utilizaba una cuenta bancaria a nombre de una empresa para captar dinero de las víctimas.

El Grupo de Delincuencia Económica y Delitos Tecnológicos de la Policía Nacional determinó que los estafadores se aprovechaban de la situación desesperada de las víctimas, tanto económica como mentalmente, para convencerlas de realizar los pagos solicitados, generando así intereses de demora y dejando a las víctimas en una situación aún más complicada.