La propuesta íntegra que se ha presentado ya es pública Anteproyecto de reforma del muro de San Lorenzo
Los principales cambios proyectados se centran en la zona que ocupa el actual cascayu. Como idea general para toda la reforma se pretende ganar espacio "de calidad" para el peatón, ampliando las zonas verdes, creando una plataforma única o instalando servicios para las bicis como un taller de reparación. El actual paseo del muro se respetaría, incluidas las pérgolas de hormigón. El concejal de obras, Olmo Ron, explica cómo quedaría la zona paseable del cascayu.Con uno o dos carriles, lo que el consistorio tiene claro es que el coche privado no tiene cabida en el futuro paseo del muro. Serán viales de servicio, para el paso de ambulancias, taxis o carga y descarga por ejemplo, tal y como está reflejado en el plan de movilidad y el plan especial del muro, aseguran.
Uno de los aspectos más llamativos de la reforma será la apertura de un gran mirador en la zona de las llamadas "chaponas".
Con la ampliación del espacio se prevé reservar parte para la ubicación de terrazas hosteleras. Pero se tendrá en cuenta el clima gijonés y, más aún, el que afecta a la zona de la playa de San Lorenzo.
La reforma conllevará la pérdida de plaza de aparcamiento, pero el equipo de gobierno asegura que se recuperarán gracias a los nuevos desarrollos urbanísticos previstos en la zona.
El anteproyecto inicia ahora un proceso de negociación con los partidos de la oposición y diferentes colectivos de la ciudad. Está abierto a cambios, por lo que es difícil dar plazos para conocer cuál será el proyecto definitivo, dice Olmo Ron. Pero su objetivo es iniciar antes de acabar este mismo año. La idea es ejecutar las obras en tres fases, con una duración total estimada de 36 meses.
La sentencia que obliga a recuperar el doble sentido de circulación en el cascayu y que el equipo de gobierno ha recurrido no será un problema. Son cosas distintas, afirma Olmo Ron.
