La polémica actual en Gijón se centra en el choque entre el gobierno asturiano y el ayuntamiento de Gijón a costa de quién tiene en su mano ayudar a paliar el problema. La consejería de vivienda pide, con el apoyo de la izquierda, suelo público en el que construir vivienda pública. Al menos 300 dicen poder levantar en Gijón, que se sumarían a las 250 de peritos. El equipo de gobierno defiende su plan Llave, un acuerdo con promotores privados para poner en el mercado vivienda a un precio más asequible que el que actualmente marca el mercado. Recientemente se han producido avances y se abre la puerta a un pequeño entendimiento, pero está por ver qué pasará realmente. Según lo aprobado hoy mismo en pleno, en el primer trimestre de 2026 debería verse algo concreto.
Con estas dos posturas enconadas y acusándose mutuamente de obstaculizar las soluciones abrimos el debate en la pequeña ínsula. Coinciden Álvaro y Aurelio que no hay una única solución. Ni rápida. Construir vivienda (pública y privada) o dar seguridad a los propietarios para que se alquilen las vivienda vacías son acciones para hacer frente a un problema grave. No caben reproches.
Álvaro entiende que el problema viene de lejos y se fue dejando crecer. Aurelio recuerda que España está muy por debajo de otros países europeos punteros en vivienda pública destinada al alquiler. Luego está el papel de los constructores, que han jugado a varias bandas.
