FUNDACIÓN ESPAÑOLA DEL CORAZÓN ALERTA

Expertos alertan del estrés como factor de riesgo para sufrir un infarto por encima incluso del tabaco

Expertos en cardiología del Hospital Quirónsalud Sagrado Corazón alertan de la relación existente entre el estrés emocional y el desarrollo de una enfermedad cardiovascular. La incertidumbre económica "produce en las personas un aumento del estrés al ver que se incrementan los precios y que sus salarios se han visto reducidos de forma drástica y con la incertidumbre de no saber si van a poder seguir afrontando estos gastos.

Redacción

Sevilla | 03.11.2022 13:46

Expertos alertan del estrés como factor de riesgo para sufrir un infarto por encima incluso del tabaco
Expertos alertan del estrés como factor de riesgo para sufrir un infarto por encima incluso del tabaco | Sevilla

La Fundación Española del Corazón (FEC) llamaba la atención recientemente sobre la prevalencia de este factor de riesgo entre la población española. Según una encuesta, el estrés (17,4%) ya tiene más prevalencia como factor de riesgo cardiovascular que el tabaquismo (15,9%). La FEC concreta que el estrés es el tercer factor de riesgo entre las mujeres, con un 21,8%; el segundo entre los jóvenes entre 16 y 35 años, con 20%, solo por detrás del tabaquismo, y, además, es el factor de riesgo con más prevalencia entre las personas que viven en núcleos de población de más de 100.000 habitantes, con un 19,2%.La situación actual favorece la aparición de este estrés que repercute de forma negativa en el mantenimiento de una vida lo más o menos ordenada basada en hábitos saludables con constancia, afirma el centro sanitario. Esto provoca, continúa, que, cuando los niveles de estrés son altos, aparezcan malos hábitos alimenticios, una disminución en la actividad física y un escaso descanso nocturno, favoreciendo, así, a la aparición de los factores de riesgo de las enfermedades cardiovasculares.

Los factores de riesgo de las enfermedades cardiovasculares se dividen en dos grupos. Por un lado, los factores no modificables, como la edad, el sexo y la herencia genética, los cuales por sí solos "no suelen ser causas suficientes para sufrir un infarto". Y por otro, los factores modificables, aquellos que pueden aparecer por causa directa del estrés como son la hipertensión arterial, el tabaquismo, niveles altos de colesterol, la diabetes, el sobrepeso/ y el sedentarismo.

La relación entre estrés y la posibilidad de sufrir un infarto de miocardio es "directa" cuando las personas sufren un episodio de estrés agudo. En esta situación, se puede disparar el proceso de fisura, erosión o rotura de placas arterioscleróticas ya existentes y el desarrollo de un trombo oclusivo provocado por un exceso de adrenalina en sangre.