En la lucha contra el cáncer, la primera clave es la anticipación. El cribado de la población de cara a algunos tipos de cáncer ha calado significativamente en la sociedad española en las últimas décadas, como en el caso del cáncer de mama. Sin embargo, no se puede decir que este sea el caso al hablar de cáncer de colon, donde las personas mayores de 50 años que se someten a los estudios periódicos de prueba de sangre en heces no llegan al 46%. La ausencia de estos cribados impide detectar un posible caso de cáncer de manera anticipada. De este modo, cuando se diagnostica a raíz de otros síntomas, los médicos se enfrentan a casos clínicos más complejos.
En HLA El Ángel, la unión multidisciplinar de las unidades aparato digestivo, anatomía patológica, radiodiagnóstico, cirugía digestiva, oncología y radioterapia, cuentan con la tecnología más avanzada para combatir esta clase de tumores, sea cual sea el estado en el que se detecte.
El Dr. Manuel Ruiz López, coordinador de cirugía de HLA El Ángel, explica que, “es necesario recordar constantemente a la población la importancia de acudir a los cribados para descartar el cáncer de colon. Se trata de una prueba nada invasiva, que permite detectar un posible caso de cáncer hasta 10 años antes de lo que tardaríamos en detectarlo por otros medios, cuando ya podría ser demasiado tarde o requerir intervenciones mucho más complejas. Lo ideal sería que el paciente nunca llegue a la consulta del cirujano”. Cuando un test muestra sangre en heces, es necesario recurrir a pruebas exploratorias para descartar un posible tumor. El centro hospitalario de HLA cuenta con una unidad de endoscopia inteligente GI GeniusTM que mejora la capacidad del médico para detectar lesiones neoplásicas y pólipos durante la colonoscopia.
En caso de que la unidad GI Genius™ acoplada al colonoscopio de HLA El Ángel detecte algún pólipo, avisa al endoscopista con un marcador visual y una alerta acústica. Esto permite al facultativo centrarse en esta región del intestino, establecer marcadores virtuales en la mucosa, obtener una muestra de tejido o extirpar una sección anómala por completo.
Por otro lado, en casos donde no sea posible que los especialistas del aparato digestivo extirpen la masa por vía laparoscópica, los cirujanos del centro cuentan con la Unidad de Cirugía Robótica, donde emplean el Robot Da Vinci XI para intervenir quirúrgicamente a los pacientes con la máxima precisión y el menor riesgo posible para ellos, reduciendo el sangrado y acortando los tiempos de recuperación en el postoperatorio. Además de la cirugía robótica, existen otras vías de intervención acompañadas de torres de laparoscopia de alta resolución para cirugías mínimamente invasivas. La Unidad utiliza contrastes, como el verde de indocianina, que permite valorar la vascularización los tejidos durante la intervención o ayudar a localizar tumores hepáticos cuando hay una metástasis, así como alternativas quirúrgicas como la técnica TAMIS que permite extirpar tumores rectales precoces por vía transanal.
“Es una ventaja contar con este conjunto de unidades especiales que permiten una aproximación multidisciplinar. De esta forma conseguimos que cualquier caso clínico siga el proceso más adecuado para lograr una recuperación completa lo antes posible”, explica el Dr. Manuel Viola, director médico de HLA El Ángel.