Llegaba el Madrid al Villamarín en una jornada propicia para abrir hueco en la parte alta de la clasificación, bien con el Girona o bien con el Barça, rivales el domingo en Montjuic. Pero para ello necesitaba una victoria en una plaza nada fácil como es el Benito Villamarín.
Recuperaba Ancelotti a Modric y Kepa, aunque el portero fue suplente volviendo a premiar así a Lunin. Lucas Vázquez ocupó el lateral derecho, donde no estaba Carvajal, y Brahim fue el compañero de Rodrygo en la delantera. El Betis, en cambio, llegaba con las sensibles bajas de Héctor Bellerín (sancionado) y Guido Rodríguez (lesionado), lo que podía complicar aún más las cosas para los de Pellegrini.
Aún así el equipo verdiblanco no dejó de competir y se asomó muy pronto, aunque tímidamente, a la portería de Lunin con un disparo de Marc Roca. Ruibal sustituyó a Bellerín en lateral derecho y le tocó bailar con un Rodrygo en estado de gracia que no le puso las cosas nada fáciles. Muy pronto reclamó el brasileño un penalti por una acción con el madrileño dentro del área que ni Soto Grado desde el campo ni Jaime Latre desde el VAR consideraron suficiente.
Rodrygo se erigió en el primer tramo del partido como el futbolista más peligroso del Madrid, que no probó a Rui Silva hasta los minutos finales del primer tiempo con un cabezazo de Rudiger.
Más peligro tuvo el Betis, que pudo marcar en dos ocasiones por medio de Ayoze y William José. En la primera Lunin detuvo el disparo del canario y en la segunda el disparo del brasileño desde la frontal se marchó rozando el palo.
Con empate a cero se llegó al descanso, pero todo cambió al inicio de la segunda. Fue Bellingham, quien si no, el que abrió el marcador. El inglés, que no estaba cuajando un buen partido, combinó con Brahim en la frontal del área y batió a Rui Silva para adelantar a los madridistas. Antes, Isco había tenido un mano a mano con Lunin en el que se lució el ucraniano.
El partido comenzó a abrirse y Rodrygo pudo hacer el 0-2, pero fue el Betis el que golpeó. Lo hizo por medio de Ruibal, que culminó un buen contragolpe verdiblanco con un zapatazo lejano imposible de parar para Lunin.
El marcador volvía a señalar empate y parecía romperse por momentos. Kroos pudo romper la igualada con un lanzamiento de falta que Rui Silva despejó a córner. También tuvo una gran ocasión Assane Diao tras una gran carrera en la que se deshizo de Rudiger, pero apareció salvador Alaba para tapar el disparo del internacional sub 21.
La más clara la tuvo, sin lugar a dudas, Isco Alarcón, que en el minuto 90 estrelló un balón en el palo tras un cabezazo. Respondió el Madrid en la siguiente jugada, con un disparo de Joselu tras un gran eslalon de Rodrygo que se marchó rozando el poste.
Chadi Riad tuvo la última en un cabezazo sobre la hora que Lunin envió a córner y el partido acabó con bronca desde la grada verdiblanca porque Soto Grado no lo dejó sacar.
El Madrid se deja así dos puntos en el Villamarín en una jornada que se antojaba clave para poder dar un golpe sobre la mesa en LaLiga. El Betis, por su parte, iguala a la Real Sociedad en su lucha por Europa, a la que visitará en la próxima jornada.
