CON RUBÉN AMÓN

Rubén Amón indulta a Quim Torra: "Ni siquiera es un político el president. Se le define como agitador cultural"

Me declaro muy partidario de Quim Torra. Y reparad en como se escribe su nombre. No como la abreviatura de Joaquim. Q-U-I-M, sino Kim, K-I-M, como la estirpe de los tiranos norcoreanos. Que gustarán poco, pero que son gente de ideas e intenciones inequívocas.

@Ruben_Amon

Madrid | 14.05.2018 10:18

Y así las ha expresado Torra en el Parlament, hablando un catalán no ya inasequible para los hispanoparlantes, sino para los propios catalanes, como si estuviera forzando el idioma a un dialecto checheno. O como si se le notara demasiado la confusión del pinganillo, o sea, el auricular desde el que Puigdemont le soplaba el discurso acaso con germanismos.

Puede que no repararais en él porque la beligerancia verbal os distrajo. O porque lo hizo el chantaje soberanista, pero un esfuerzo visual desenmascara la añagaza, del mismo modo que una atención extremada a contraluz permite identificar los cordeles con los que Puigdemont mueve su marioneta. Cordeles amarillos, fijaos bien.

Debe sentirse frustrado el presidente Kim porque no le dejan ocupar el despacho. Y porque sus colegas lo observan con los recelos de un clon, pero también debe confortarle haber llegado a la cima del escalafón de la política catalana sin mérito alguno. De hecho, ocupaba el número 11 de la lista de Junts per Cataluña. Una posición gregaria y anónima desde la que ha prosperado a la cima porque estamos en los tiempos de peleles y de líderes interinos.

Ni siquiera es un político el president. Se lo define como agitador cultural. Y se nos antoja más agitador que cultural. No ya por los tuits supremacistas de los que ahora reniega, sino porque esta misma verborrea del enemigo exterior y de la conspiración ibérica alojan acaso en la pretensión de convertirse en el primer presidente de la república catalana.

No sería la primera vez que la marioneta se revela al creador. Ni la primera ocasión en que Pinocho ensarta a Gepeto con la nariz afilada del mentiroso.