La actualidad de Marbella y la Costa del Sol Oocidental.

'Más de uno Marbella'. Miércoles, 21 de marzo de 2018.

La polémica sobre el tratamiento de animales abandonados y vagabundos de Marbella sigue adelante. Lo hace entre otras cosas porque la palabra apenas tiene valor y garantía en la política municipal. El Ejecutivo ha dicho que va a retirar o cambiar el pliego de condiciones para la adjudicación del cuidado de animales, diferenciando a los domésticos -que irán a la Triple A- del resto, pero como no lo ha hecho, pues flanco desguarnecido que deja y por el que ataca, sigue atacando más bien, la oposición, PSOE e Izquierda Unida, sobre todo. La primera derivada está en la Ley 11/2003, de 24 de noviembre, de Protección de los Animales y su capítulo VI, artículo 27, disposición tercera; o sea, donde se lee que: “Corresponderá a los Ayuntamientos la recogida y transporte de los animales abandonados y perdidos, debiendo hacerse cargo de ellos por un plazo mínimo de 10 días hasta que sean cedidos o, en último caso, sacrificados”. Como quiera, como decíamos, que no hay distinción aún sobre el papel entre las mascotas y los demás, surge la segunda clave; la palabra “sacrificados”. El Ejecutivo ha transcrito tal cual el artículo. En la oposición piden que se especifique en el pliego que en ningún momento habrá animales sacrificados, porque la normativa no obliga a ello y deja que cada Ayuntamiento decida qué hacer pasados esa decena de días. ¿No sería mejor que la Ley fuera más clara y concreta? Luego está Costa del Sol Sí Puede que asiste en segunda fila a la escena, luego, según dicen sus concejales, de haber estado pidiendo desde 2015 lo que ahora exigen PSOE e Izquierda Unida.