ENTREVISTA EN POR FIN NO ES LUNES

La apnea del sueño tiene cura: científicos españoles encuentran un tratamiento para revertirla y dejan de considerarla como enfermedad crónica

La apnea es una obstrucción que provoca paradas respiratorias que pueden durar entre unos pocos segundos y varios minutos y que hasta ahora únicamente era tratada de manera paliativa a través de una máquina de oxígeno.

ondacero.es

Madrid | 08.05.2022 10:29

La apnea del sueño tiene cura: científicos de Granada encuentran el tratamiento que deja de considerarlo enfermedad crónica

La apnea obstructiva del sueño, la falta de oxígeno al dormir. Esta enfermedad crónica afecta al 40% de la población mundial y únicamente tenía una solución: utilizar una máquina de oxígeno ruidosa y molesta para muchos pacientes.

Hablamos de una obstrucción que provoca paradas respiratorias que pueden durar entre unos pocos segundos y varios minutos e impiden que el sueño ejerza su función reparadora. En España, la apnea del sueño afecta, como mínimo, al 25% de la población adulta con apnea relevante. Lo califican de problema de salud público y, según las estimaciones de los expertos, los casos casi se han duplicado en los últimos diez años.

La buena noticia es que a partir de ahora esto puede cambiar porque investigadores de la Universidad de Granada y del Hospital Virgen de las Nieves han concluido que la apnea obstructiva del sueño no es una enfermedad crónica como se pensaba, y que se puede curar.

Almudena Carneiro es doctora en Psicología, profesora e investigadora postdoctoral en la Universidad de Granada y la investigadora principal del estudio, y en Por fin no es lunes explica cómo han conseguido que este trastorno pueda remitir en un 62% de los casos: "Lo hemos conseguido con una intervención interdisciplinar: cambios de hábitos de vida y pérdida de peso".

¿Cuál es la causa principal de la apnea?

Según explica Carneiro, las causas principales son el sobrepeso, la obesidad y los hábitos de vida no saludables, como pueden ser el sedentarismo, una dieta hipercalórica, el consumo de alcohol y tabaco y una baja higiene de sueño.

Asegura que el origen de su motivación para llevar a cabo la investigación fue comprobar que la apnea tenía unas causas que se podían intentar revertir. Es decir, ahora únicamente se trataba con la máquina, pero no se les daban más opciones: "Se les decía a los pacientes que tenían que cambiar sus hábitos, pero no se les daban los recursos para poder hacerlo. Entonces, si la causa es el sobrepeso y la obesidad, ¿por qué vamos a tratar esta enfermedad como crónica? De ahí surgió la idea".

Otro de las razones fue comprobar la baja adherencia que tenían los pacientes a la máquina: "Al final, se evita su uso porque es hay que tenerla puesta toda la noche y tiene efectos secundarios: dolor de cabeza o señales en la cara. Además, de que el paciente tiene que llevarla a todos los sitios, por ejemplo, si se va de viaje".

Conclusiones del estudio

Explica que el diseño del estudio comenzó en 2017 y que, después de elaborar la intervención, empezaron a reclutar a los pacientes y comenzaron a implantar dicha intervención. Los resultados fueron muy positivos: después de ocho semanas de intervención, un 45% pudo dejar de utilizar la máquina y se les dio el alta médica. A los seis meses, no sólo se mantuvieron los beneficios, sino que aumentaron y un 62% pudo dejar de usar la máquina.

Pero los beneficios no fueron solo estos, sino que también hubo otros de composición corporal: los pacientes perdieron una media de un 7% de peso inicial y bajaron el riesgo cardio metabólico, es decir, disminuyó hasta un 40% el riesgo de sufrir una muerte cardiaca. Reconoce que el porcentaje restante no pudo llegar a dejar de usar la máquina, pero mejoró significativamente su estado de salud.

Los casos de apnea se han duplicado en los últimos años

Carneiro explica que esto es debido al incremento de la obesidad provocada por un aumento de hábitos de vida no saludables en las personas. Además, un aspecto característico y preocupante es que está bajando la edad con la que se comienza a tener este trastorno.

Por eso, con su estudio, lo que se intenta transmitir es el mensaje de que, por una parte, la apnea no es una enfermedad crónica, sino que con un tratamiento de pérdida de peso y cambios de hábitos de vida, puede remitir.