¿Por qué madrugamos si a nadie le gusta? ¿Es bueno para la salud?

La doctora en Psicología Cristina Escribano, profesora en el Centro Uni-versitario Cardenal Cisneros y especialista en Psicología Educativa en cómo influyen los hábitos del sueño, Cristina Escribano, nos explica en Más de uno de dónde viene la costumbre de madrugar. "La gente se despertaba cuando cantaba el gallo, que era cuando salía el sol", comenta y añade "evolutivamente cuando no había luz eléctrica se iban a dormir cuando se ponía la luz del sol".

Asimismo, recomienda que cuando nos levantemos haya luz y cuando nos acostemos no la haya, "la luz eléctrica hace que durmamos peor". Por otro lado, recalca que a medida que se va creciendo los ciclos del sueño van cambiando.

Robert Calvo se ha desplazado hasta la central de SEAT en Barcelona para hablar con otro gran madrugador, Pedro Lopez Pino, que vive en Collblanc y lleva 30 años levantándose a las 4.15. Asegura que "es cuestión de mentalidad y de acostumbrarse".

Alsina se somete al test del madrugador

Carlos Alsina se somete al test de la doctora Escribano, en el que establece si su cuerpo reacciona bien a madrugar o no. Para ello, responde a las siguientes preguntas que se miden en una escala del 1 al 5:

1. Considerando únicamente tu propio ritmo, ¿a qué hora te levantarías entre las 6 de la madruga y la 1 de la tarde, si fueras enteramente libre para planificar el día?

2. Durante la primera hora después de haberte despertado ¿Cómo te encuentras? Muy cansado, bastante cansado, fresco, muy fresco.

3. ¿A qué hora del día te encuentras cansado y tienes la necesidad de dormir? Teniendo como referencia las 9 de la tarde y hasta las 4 de la madrugada.

4. ¿A qué hora del día te encuentras mejor? ¿Medianoche? mediodía?

5. Suele hablarse de personas tipo matutino o vespertino. ¿De cuál de estos tipos te consideras? Claramente matutino; más matutino que vespertino; más vespertino que matutino; Claramente vespertino.

Los resultados establecen tres tipos de personas: Las alondras (matutinos), tienden a ser más responsables, sociables y amables. Son más realistas y racionales. Los búhos (vespertinos), tienden a ser impulsivos y extrovertidos, prefieren lo abstracto y lo simbólico. O ningún tipo.